Capítulo 5: Un Cierto Viaje a las Montañas Nevadas de un Club de Caligrafía
El fin de semana había llegado, y era alrededor del mediodía. Los miembros del club de caligrafía fueron recibidos por un mundo de plata.
"¡Son los montañaaaaaas!"
"¡Que frío! ¡Blanco! ¡Y lleno de nieve!”
El clima había bendecido esta estación de esquí, Keiki y Yuika estaban llenos de energía en vista de eso.
"Si sigues gritando así, causarás una avalancha."
"Cielos, ustedes dos están actuando como niños."
En respuesta, Sayuki y Mao actuaban como sus padres. El último en comentar fue Mizuha, que simplemente se estremeció por el frío y gimió. Habían tomado el autobús temprano en la mañana, y después de llegar al alojamiento, inmediatamente se dirigieron a la estación de esquí.
Todos ellos estaban con un atuendo perfecto de esquí, con Keiki usando uno gris, Sayuki uno azul, Yuika uno rosa, Mao uno naranja y Mizuha uno verde. Naturalmente, todos llevaban sombreros y guantes para protegerse del frío.
"Tendremos que agradecerle a Ootori-san por dejarnos tomar prestada su residencia."
"De acuerdo. Se lo haré saber la próxima vez que la vea.”
Como antes, se alojaron en otra casa perteneciente a la familia Ootori. Aparentemente, tenían bastantes residencias como esta, lo cual fue un pensamiento impresionante.
"Nii-san, Nii-san."
"¿Hmm? ¿Qué pasa, Mizuha?"
La hermana menor de Keiki tiró de su manga manga y señaló el edificio del centro de esquí al que acababan de venir.
"¿Puedo leer libros dentro?"
"Te mueres por no salir, ¿eh?"
Por supuesto, el propio Keiki luchó duro para soportar el punzante frío golpeando su piel. Para alguien como Mizuha, que era más vulnerable al frío, esto debe ser un sufrimiento aún mayor. Pero la persona que respondió a Mizuha fue Sayuki en su lugar.
"No voy a permitir que nadie se quede dentro. Todos participarán".
"¿Ehhh...?"
"Ya que estamos aquí, quiero divertirme contigo, Mizuha."
"Si tú lo dices, Nii-san."
Gracias a su hábil persuasión, Mizuha accedió a participar. Rara vez verías montañas nevadas como estas en donde vivían, así que sería un desperdicio pasar ese tiempo dentro.
"Sin embargo, es bastante difícil moverse con este traje de esquí. Además de eso, parece que el poder femenino es demasiado bajo en comparación con un traje de baño o algo así".
"¿El poder femenino? Bueno, así es como es".
"¿Por qué no usamos trajes de baño todo el invierno para encantar a Keiki-kun todo el año?"
"Vas a morir, así que deja de hacer eso."
Keiki no quería ver un cadáver congelado con traje de baño. El objetivo de estas prendas era protegerte contra el frío, por lo que no se podía evitar si no se vieran tan a la moda.
"Olvídate de los trajes de baño, ¿Qué tal si seguimos adelante? Estamos perdiendo el tiempo aquí".
"¡Sí! ¡Yuika quiere tener una pelea de bolas de nieve!
"Pero estamos en una estación de esquí."
"Yuika nunca ha esquiado antes."
"Sí, supongo que casi nunca nieva en nuestra ciudad."
Lo máximo que habían conseguido en todo el año fue la pequeña cantidad de nieve en Nochebuena. Y todo se derritió poco después.
"Tuve un poco antes, pero fue un momento caluroso."
"¿Puedes esquiar, Mao-senpai?"
"Mamá a veces me llevaba a una estación de esquí cuando era pequeña."
"Nanjou básicamente puede hacer cualquier cosa."
"Puedes pedir prestados esquís y trineos. Ya que no puedo esquiar en absoluto, creo que voy a montar galantemente un trineo.”
"¿Cómo que galante?" Yuika le dio la orgullosa Sayuki una mirada fría, y luego Mao le llamó.
"¿Por qué no probar un poco de esquí después de la pelea de bolas de nieve? Puedo enseñarte."
"¿En serio?"
"Síp. Me sentiría solo esquiando por mi cuenta."
"¡Muchas gracias! Yuika está un poco interesada".
La poco atlética Sayuki eligió el trineo, mientras que Yuika desafió las pistas de esquí con la ayuda de Mao.
"Supongo que voy a tratar de esquiar también. ¿Y tú, Mizuha?"
"Voy a hacer un hombre de nieve por allí."
"Eso realmente suena muy divertido."
Mizuha era el tipo de persona que podía trabajar en algo sola, lo que hizo de esto un ajuste perfecto en ella. Después de que todos tomaron sus decisiones, empezaron.
"Oh, esto es bastante divertido." Keiki era un principiante en el esquí, pero simplemente deslizarse por una colina no era tan difícil como había imaginado, y logró tener bastante éxito.
El viento que soplaba más allá de él le dio un impulso. Sentía que podía acostumbrarse a esto. Después de disfrutar un poco de su tiempo solo, se encontró de nuevo en la parte baja. Mao y Yuika caminaron hacia él con esquís y bastones de esquí en la mano.
"Oh, lo estás haciendo bastante bien, Kiryuu."
"Sí, sólo tienes que acostumbrarte a lo básico."
"Yuika sigue un poco asustada..."
"Sí, supongo que no se puedes esquiar tan bien todavía."
"¿Estás ignorando el consejo de Nanjou?" Keiki preguntó, y Yuika hizo una cara incómoda en respuesta.
"Mao-senpai le está enseñando a Yuika lo básico, pero sigue siendo demasiado difícil para Yuika..."
"Ugh... Lo siento..."
"Bueno, Nanjou esquía sobre todo con sólo por intuición, supongo."
Ella era el tipo de persona que hacía las cosas con talento natural, así que enseñar esto podría no ser lo más fácil para ella. Keiki se sentía un poco mal por Mao, pero a este ritmo, ninguno de ellos sería capaz de disfrutar del esquí.
"Entonces, ¿Por qué no te enseño, esquiarás un poco más, Nanjou?"
"¿Estás seguro?"
"Sí, tengo ganas de tomar un descanso de todos modos."
"¿En serio? Entonces, por favor, hazlo." Mao dio una disculpa ligeramente derrotada y subió hacia el curso de mayor cualificación.
Después de despedirla, Keiki se volteó hacia su estudiante.
"Entonces, ¿Debemos empezar la lección?"
"¡Por favor, hazlo, Keiki-sensei!"
Yuika formó puños y agarró sus bastones de esquí en determinación.
"Para empezar, olvida todo lo que Nanjou te enseñó. Probablemente no será de mucha utilidad".
"Entendido. Yuika se lo imaginó.”
"No podrás hacerlo de forma natural en solo un día, así que concentrémonos en el curso para principiantes por ahora".
"Entendido."
"Por ahora, comenzaremos con la postura ハ..."
Keiki comenzó con una lección básica, enseñándole lo que había aprendido al ver a los demás y probarse a sí mismo.
"Ya que no puedes estar completamente erguida justo después de empezar a esquiar, tienes que dejar caer tu centro de gravedad un poco más. Baja un poco la cintura." Explicó, usando la imagen mental que tenía.
"¿Así?"
"Um... un poco más como esto..." Keiki se movió junto a la chica, poniendo su mano en su cadera.
"¡¿Hya?!"
"Así. Tienes que inclinar las rodillas un poco más".
"Ah, B-Bien..." Yuika comenzó a inquietarse, pero obedeció el consejo de Keiki.
"Sí, eso es genial. Ahora te mostraré como sostener los bastones de esquí.” Keiki confirmó la mejora en su postura y continuó comprobando cómo sostenía sus bastones.
Esta vez, caminó a hacia su espalda, agarrando sus dos manos y moviéndolas de un lado a otro.
"Cuando estás esquiando, sostienes las puntas de los palos detrás de ti—"
"¿No estás demasiado cerca...? ¡Y-Yuika puede sentir tu aliento!"
"... ¿Eh? Yuika-chan?
Al darse cuenta de que algo estaba pasando con su estudiante, Keiki puso la lección en espera. Cuando caminó alrededor de la chica para verla, fue recibido por su cara roja de remolacha. Parecía una manzana madura.
"¿Estás bien? Tu cara se está quemando de rojo."
"¿De quién es la culpa que esto?"
"¡¿Hah?! ¡¿Quieres decir que es mía?!"
"¡Está demasiado cerca! ¡Estás tocando la cadera de Yuika, abrazándola por detrás como si fuera natural, y tu aliento le estaba haciendo cosquillas al cuello de Yuika todo ese tiempo!"
"A-Ah. Lo siento..."
Tal vez Keiki había estado un poco demasiado cerca después de todo.
"Acabo de ver a los padres enseñando así a sus hijos antes, así que lo usé como referencia".
"Básicamente, estabas tratando a Yuika como a una niña, y por eso te acercaste tanto".
"Uh..." Keiki no sabía cómo responder.
Yuika, sin embargo, no mantuvo demasiado en ello. Se arregló el pelo.
"... Bueno, que Senpai actuara un poco pegajoso tampoco era tan malo. Yuika estaba un poco sorprendida, pero se sentía como si fuéramos una pareja adorable..."
"¿Una pareja adorable?".
Keiki se sorprendió, pero no se equivocó. Una lección individual entre chico y chica podría fácilmente interpretarse así. Keiki lo tenía en cuenta durante la enseñanza después, y después de unos cuantos altibajos, Yuika logró esquiar alrededor de una hora sin caerse.
Keiki terminó de entrenar su Kouhai, y después de quitarse los esquís, regresó a la estación de esquí para tomar un descanso. Vio a Mizuha cerca del edificio, tomando fotos de dos muñecos de nieve. Eran del tamaño de los niños de primaria, con ramas pequeñas como extremidades.
"¿Como te va?"
"Ah, Nii-san."
"Así que hiciste dos muñecos de nieve, ¿eh?"
"Estaba pensando en hacer sólo uno, pero entonces podría haberse sentido solo, así que le hice una pareja".
"Ya veo."
Keiki dijo. "Pero como son una pareja, ¿Por qué no darles algunos hijos también?"
"Ah, eso suena bien."
Keiki acabó diciendo lo primero que se le vino a la mente, pero Mizuha accedió de inmediato. Ella apartó su teléfono inteligente y mostró una sonrisa mientras se paraba frente a él.
"¿Me ayudas, Nii-san?"
"Claro."
"Entonces vamos a hacer algunos niños juntos, ¿de acuerdo?"
"¡Para los muñecos de nieve verdad!"
Eso podría sonar como algo completamente diferente dependiendo del contexto.
"Siempre estoy lista para hacerlos, ¿sabes?"
"Estás hablando de los muñecos de nieve, ¡¿Verdad?!"
Después de eso, hicieron muchos niños.
Después de hacer algunos niños (de nieve) con Mizuha, Keiki tomó un descanso rápido en el baño dentro del centro de esquí, y cuando volvió Sayuki le llamó, tirando de un trineo después de ella.
"Ah, Keiki-kun, ¿estabas tomando un descanso?"
"Sí. ¿Qué hay de ti, Senpai?”
"He estado montando sola en mi trineo todo este tiempo, así que quería bajar desde un poco más arriba. ¿Por qué no te unes a mí, Keiki-kun?"
"Suena bien."
Había estado planeando esquiar un poco más, pero montar en un trineo no sonaba tan mal. Con eso decidido, los dos se sentaron en el ascensor y se dirigió lentamente hacia la cumbre. Todos los demás huéspedes a su alrededor estaban equipados con esquís o tablas de snowboard, haciendo de Keiki y Sayuki los únicos con un trineo.
"La vista aquí es otra cosa."
"Sí, estamos bastante arriba."
"¿Vamos a estar bien bajando todo este camino con un trineo?"
"Claro. Vamos a subir.”
"Sí señora."
Sayuki tomó la delantera, y Keiki se subió al trineo después de ella.
"Agárrate a mí, ¿de acuerdo?"
"Lo haré."
La seguridad primero después de todo. Ambos se aferraron firmemente a las empuñaduras a su izquierda y derecha. Después de comprobar que todo estaba listo, comenzaron a descender. Poco a poco, subieron la velocidad.
"Oh, esto es bastante divertido."
"¿Verdad?"
No se podía hacer ningún movimiento preciso en cuanto a dirección, pero tenía un tipo de disfrute diferente al de esquiar. Tenía sentido que esto fuera popular entre los niños.
"Siempre admiré la idea de montar en bicicleta con dos personas".
"Un trineo es muy diferente de una bicicleta, ¿no crees?"
"¿En serio? Tal vez tengas razón."
"Por cierto, ¿No vamos demasiado rápido?"
"De hecho, lo estamos. Tal vez empezamos un poco demasiado alto"
"Además… si no giramos a la derecha pronto, ¿no nos saldremos del curso?”
El trineo pasaba por el lado izquierdo del recorrido, deslizándose hacia abajo a una velocidad impresionante. Si siguieran por el camino que iban, se estrellarían en un matorral.
"¡Sayuki-senpai, gira a la derecha! ¡Tienes que girar ahora mismo!"
"¿Girar? ¿Puedes hacer eso con un trineo?"
"... ¿No?" El cerebro de Keiki estaba lleno de miedo después de oír eso. "¡Senpai, para! ¡Detente!"
"¡No sé cómo usar los frenos!"
"¿Estás bromeando?"
Su única gracia salvadora era que ningún acantilado estaba delante de ellos. Pero el hecho de que estuvieran en trineo a alta velocidad no lo hizo menos peligroso.
"Ouaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa”
"¡¡D-Detenteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!"
Sus intentos desesperados de detenerse demostraron ser inútiles, y se metieron directamente en el matorral delante de ellos.
*
En un profundo bosque cubierto de nieve, Sayuki y Keiki finalmente se detuvieron y se levantaron del trineo.
"Pensé que iba a morir..."
"También lo creí..."
Si era posible, Keiki preferiría no volver a experimentar eso.
"Sayuki-senpai, ¿estás herida en alguna parte?"
"Estoy bien. ¿Qué hay de ti, Keiki-kun?
"Estoy bien."
Después de mover su cuerpo para comprobar si había heridas, no encontró nada fuera de lo común. En cambio, estaba cansado debido a la experiencia cercana a la muerte.
"Hemos bajado bastante."
"Así es..."
Miraron hacia el lugar desde el que cayeron. Aunque no era una pared vertical, subir esa pendiente...
"Eso parece ser bastante difícil."
"De hecho..."
Si perdieran el equilibrio en el proceso, las cosas podrían ir cuesta abajo. Literal y figurativamente.
"Entonces tomemos un desvío y volvamos a la estación de esquí."
"Eso es todo lo que podemos hacer, supongo."
Significaría que tenían que caminar por el bosque, pero sería mucho más seguro que intentar la arriesgada forma de subir.
"¿Qué pasa con el trineo?"
"Vamos a dejarlo aquí. Esta es una situación de emergencia, así que se lo explicaré al personal más tarde".
"Entendido."
Así, los dos comenzaron a caminar de regreso hacia el albergue de esquí. Aunque se habían desviado un poco, el área no era demasiado grande para empezar, por lo que deberían volver pronto. Dicho esto, después de haber caminado durante unos minutos, ese pensamiento ingenuo los sorprendió. A diferencia de la estación de esquí, que controlaba la nieve en los alrededores, aquí se quedó solo. La nieve podría incluso llegar hasta las rodillas dependiendo de la ubicación, haciendo de este trabajo bastante agotador.
"Sayuki-senpai, está bastante profundo aquí, así que ten cuidado."
"Gracias."
Como Keiki era más alto que la chica, caminó al frente e hizo un camino. Resultó ser la elección correcta para dejar atrás el trineo. No podrían pasar por aquí llevando algo tan grande. Pero su entorno comenzó a cambiar.
"Woah, está empezando a nevar..."
"De ninguna manera..."
El cielo despejado se llenó repentinamente de espesas nubes, y justo cuando Keiki estaba pensando en la brisa fría que soplaba más allá de ellos, partículas de nieve cayeron del cielo.
"Como se esperaba de las montañas. El clima cambia tan rápido como el temperamento de un marido infiel."
"¿Realmente no podrías haber pensado en algún mejor ejemplo verdad?"
Por otra parte, este no era el momento de bromear. Keiki miró a la nieve cayendo, murmurando para sí mismo.
"Esto podría ser realmente malo..."
Y, unos minutos más tarde, su mala premonición resultó ser cierta. Mientras estaban en movimiento, el clima se volvió malo muy rápidamente, y la suave nevada comenzó a convertirse en una tormenta. El viento se hizo más fuerte, y la temperatura disminuyó significativamente. Sin embargo, el mayor problema no era ni siquiera el viento o la temperatura, sino la nieve que cae sin cesar. Debido a esto, su campo de visión se hizo mucho más pequeño, y pronto perdieron la pista de la dirección de regreso a la estación de esquí.
"......"
"......"
El chico y la chica se quedaron quietos.
"Keiki-kun..."
"Sayuki-senpai..."
"¿No es esto...?"
"De hecho lo es..."
""El evento 'Stranded in the Snowy Mountains'?!""
Hablemos de esto. Más o menos se parece a un evento "Varado en la Montaña Nevosa". Es una situación que pone en peligro tu vida. A menudo se ven tales desarrollos en mangas o dramas, pero la mayoría de la gente rara vez se encuentra con uno en la realidad.
"¡¿Ehhh?! ¡¿Q-Qué debemos hacer?! ¡¿Qué hacemos al respecto?!"
"¡Vamos a calmarnos por un momento! ¡Tenemos que contactar a alguien en tiempos como estos!"
"¡A-Así es, tenemos el arma de la civilización, es decir, un teléfono inteligente, con nosotros!"
De hecho, siempre es una mala idea entrar en pánico. Si empiezas a actuar precipitadamente en función de la ansiedad, perderás de vista lo que te rodea. La respuesta perfecta para las emergencias es mantener la calma. Para empezar, sólo tenían que ponerse en contacto con sus amigos y solicitar ayuda.
"Ah." Sayuki palideció.
"¿Qué pasa?"
"Pensé que sería malo si lo perdía, así que dejé mi smartphone en mi habitación..."
"¡Ah, yo también!" Keiki gritó desesperado.
Keiki sabía su suerte, así que había dejado su teléfono en su habitación por razones de seguridad.
"... Es culpa mía. Dije que deberíamos montar el trineo hacia abajo desde la cumbre.”
"No, tengo igual de culpa, ya que no pensé en el peligro y me uní a ti."
"Pero..."
"Además, vamos a centrarnos en llegar a casa de forma segura por ahora."
"... Así es."
Echarse la culpa en una situación como esta no serviría de nada. Keiki se sintió aliviado de que Sayuki no se quedara en un estado de ánimo desanimado.
Pero gracias a esta ventisca, ni siquiera puedo ver justo delante de mí...
Eran montañas nevadas, así que si caminaban por un acantilado sin darse cuenta, sería el fin de inmediato. Ahora que habían perdido el camino, vagar descuidadamente podría empeorar su situación. Si tan sólo pudieran al menos encontrar un lugar para pasar la tormenta...
"¡Keiki-kun!"
"¿Qué pasa?"
"¡Hay un edificio allí!"
"¿Eh?"
Cuando Keiki miró hacia donde Sayuki estaba señalando, vio una sombra negra. No podía ver la forma exacta debido a la ventisca, pero a juzgar por el tamaño y la forma general, debería ser una casa o un edificio.
"¡Bueno momento! ¡Vamos, Sayuki-senpai!"
Fue un rayo de esperanza en esta situación desastrosa. Se apresuraron al edificio, sólo para descubrir que era una pequeña cabaña de montaña. En comparación con su pequeño tamaño, tenía ventanas relativamente grandes. Era un lugar perfecto para buscar refugio.
"¡Disculpen! ¡¿Hay alguien ahí?!" Keiki llamó a la puerta, pero no hubo respuesta.
Aparentemente, estaba desierta.
"No parece que haya nadie aquí, así que usemos esto para protegernos de la ventisca". Dijo Keiki. Barrió la nieve de delante de la puerta.
"Déjame ayudarte."
Limpiaron la nieve hasta que se abrió la puerta, y Sayuki giró el pomo de la puerta. Entraron a toda prisa y cerraron la puerta detrás de ellos.
"Ahhh, estamos salvados..."
"Afortunadamente la puerta no estaba cerrada."
"Me pregunto si nos regañarán por entrar."
"Fue una situación de emergencia. Estoy seguro de que nos perdonarán.”
"Por ahora, tendremos que permanecer en espera hasta que la nieve se detenga. Sería genial si tuvieran algo caliente aquí".
"Probablemente no. Es sólo una pequeña cabaña de montaña, después de todo.”
"Es cierto..."
Una pequeña cabaña como esta no fue hecha para vivir, así que era más como si estuvieran ahora dentro de un congelador. El piso era de hormigón sólido, y había un gran estante de pie en una esquina. La habitación era de unos doce metros cuadrados, y las herramientas desconocidas probablemente utilizadas para hacer frente a la nieve excesiva estaban esparcidas. Dado que este no era un lugar hecho para vivir en, no se encontraba nada para calentarse. Fue un gran lugar para la protección contra la ventisca, pero quedarse aquí por mucho tiempo tampoco era una opción. Además de eso—
"Esto no es bueno. Mi ropa está mojada por la nieve..."
"Yo también..."
Sayuki se miró a sí misma, y Keiki asintió. Ya que caminaron por la ventisca, el agua se había acumulado dentro de sus ropas. Lo mismo pasó en sus gorros y guantes, robándole rápidamente a los dos de la última parte de calor que tenían. A este ritmo, la situación sólo empeoraría.
"A este paso, nos congelaremos hasta morir."
"Incluso si no hay calentador aquí, podríamos encontrar algunas toallas u otra ropa. Echemos un vistazo." Keiki trató de mantenerse positivo.
Sin embargo, no se encontró nada de gran valor. No había estufa ni fósforos. Fue poca sorpresa que no pudieran encontrar ropa.
"No hay nada que nos caliente..."
"¡Ah, encontré algunas mantas, Sayuki-senpai!"
"Eh, ¡¿En serio?!"
"Sí. Pero..." Keiki continuó mientras le mostraba la manta. "Sólo había uno."
"......"
A la vista de eso, Sayuki perdió su capacidad de hablar. Necesitaban dos mantas para dos personas.
"Oye, Keiki-kun..."
"Sí..."
"Sé de un método para sobrevivir a esta situación..."
"Qué coincidencia. Yo también..."
Si continuaban usando su ropa empapada, eventualmente se congelarían hasta morir. Con la manta que Keiki encontró, podían calentar sus cuerpos desnudos, pero con sólo había una disponible...
"Básicamente... tenemos que calentarnos con el cuerpos del otro..."
"........."
Sayuki habló con un tono avergonzado, que sólo se sumó a la propia vergüenza de Keiki.
"... Esto es vergonzoso, así que preferiría que no me miraras".
"Por supuesto."
"Mi ropa interior de hoy no es linda en absoluto."
"¡¿De eso estás avergonzada?!"
Pasaron unos minutos después de encontrar el artículo, y Keiki y Sayuki estaban sentados uno al lado del otro bajo la manta. Por supuesto, debajo de esta manta sólo llevaban su ropa interior, así que básicamente estaban desnudos.
"Ahora hace mucho más calor."
"Así es."
"Pero esto es realmente vergonzoso..."
"Lo es..."
"Nuestra única gracia salvadora es que nuestra ropa interior estaba lo suficientemente seca como para seguir usándola."
"Si no fuera por eso, estoy bastante seguro de que mi razón se rompería."
Keiki podría agradecer a sus estrellas de la suerte por eso. Por otra parte, esta situación ya era lo suficientemente peligrosa por su razón.
"Pero hemos compartido un tiempo como este juntos antes, así que esto no es nada especial".
"Eh, ¿En serio?"
"Cuando fuimos a la piscina juntos durante las vacaciones de verano. La parte superior de mi bikini fue arrastrada en la piscina de olas y me cubriste el pecho".
"Ah, ahora lo recuerdo."
Keiki no podía permitir que la chica se avergonzara públicamente así, así que recurrió a un último esfuerzo de abrazarla de frente.
"Pensando en ello, hice algo escandaloso allí, ¿Verdad...?"
"Pero yo estaba muy feliz." La chica mostró una amable sonrisa. "Keiki-kun siempre me protegió. Incluso hoy cuando estaba plagada de ansiedad... A pesar de que eres más joven que yo, fuiste muy confiable".
"Ya veo." Se sentía avergonzado de que le dijeran eso directamente.
No sabía cómo manejar esto.
"Fufu. Realmente te quiero, Keiki-kun."
"¿Hah? ¡¿S-Sayuki-senpai?!"
La chica suavemente se apoyó en Keiki, poniendo su cabeza sobre su hombro. Una vez más, Keiki sintió que su razón estaba a punto de romperse como un vaso cayendo al suelo.
"Me lo imaginaba todos los días. Un futuro pasándola contigo, Keiki-kun. No sólo ahora, sino estando los juntos para siempre. Me di cuenta de lo divertido que sería".
"Sayuki-senpai..."
"Como soy una masoquista, me gusta cuando alguien me trata rudamente, pero... Si es Keiki-kun, entonces probablemente estaría igual de feliz con un amor normal".
"........."
Cuando Keiki oyó esto, no sabía qué decir. Nunca había pensado que la chica le diría esto.
Otra vez.
Keiki se sentía feliz, pero sin embargo algo le picó en el pecho.
Es lo mismo que con Yuika-chan...
A pesar de que se sentía feliz al oír esto, tampoco podía aceptar completamente el sentimiento.
Sayuki-senpai dijo que se convertiría en una chica normal por mí. Eso debería hacerme feliz, y sin embargo me siento tan sombrío...
Se sentía sombrío, y su pecho se apretaba. Cada vez que recibía afecto de ellas, cada vez que se sentía atraído por ellas, aparecía este sentimiento desconocido. Keiki había asumido que esta podría ser la razón por la que no podía encontrar una respuesta a sus confesiones individuales, pero...
¿En realidad no quiero que los dos se conviertan en chicas normales?
Esa hipótesis podría explicar esta reacción. Aunque Keiki pensó que era idiota, esa idea no desaparecería.
"— ¡Keiki-senpai! ¡Bruja-senpai! ¡¿Están bien?!"
"... ¿Hah?"
La puerta de la cabina se abrió y Yuika saltó dentro, llevando los pensamientos de Keiki a un cese brusco.
"¡Ah, ahí están! ¡Mao-senpai! Mizuha-senpai!”
La chica rubia se volteó hacia la puerta de nuevo, y tanto Mao como Mizuha entraron.
"Ah, tienes razón. Ambos están."
"Gracias a Dios..."
Vieron a las dos personas perdidas y suspiraron en alivio. Por supuesto, aquí es donde normalmente se haría un reencuentro emocional, pero Yuika hizo una mirada fría mientras miraba el interior de la cabaña.
"... Ustedes dos. ¿Por qué están así?"
"Ah..."
Naturalmente, Keiki y Sayuki seguían casi desnudos. Incluso si estuvieran cubiertos en la manta, todavía se podía ver lo que había debajo. La ropa que se habían quitado estaba justo al lado de ellos también, así que tratar de negarlo no funcionaría.
"¡¿Vinimos aquí corriendo por la preocupación... y luego los encontramos así?! ¡Qué desvergonzados pueden ser!"
"¡Eso no es todo, Yuika-chan!"
"Fue una situación de emergencia. Nuestra ropa estaba empapada debido a la ventisca.”
"Hmph..."
"Por otra parte, no puedo decir que no me gustara la situación."
"¡Realmente eres una completa pervertida, Bruja-senpai!" Yuika se quejó enérgicamente a la vista de su senpai. Keiki la ignoró, sin embargo, y le hizo una pregunta a su Kouhai.
"Sin embargo, me sorprende que hayas encontrado este lugar en medio de esa ventisca."
"¿De qué estás hablando? Ya dejó de nevar."
"¿Hah? ¡De ninguna manera!"
Keiki miró afuera y vio el sol brillando como si esa ventisca de ahora hubiese sido una broma.
"¿Qué tan caprichoso puede ser el clima aquí?" Keiki murmuró con incredulidad, cuando Sayuki habló.
"Por cierto, ¿Cómo sabías que estábamos aquí?"
"Qué pregunta tan estúpida. Una vez que dejó de nevar y volvimos a la casa, pudimos ver dos pistas afuera, así que ni siquiera tuvimos que buscar por mucho tiempo".
"¿Espera, la casa?"
"¿Qué quieres decir?"
"Esto está justo detrás de la residencia privada de Ootori-senpai."
"¿Qué dijiste?".
Después de esa exclamación, Yuika y las demás esperaron a que se cambiaran, y una vez que salieron, Keiki y Sayuki vieron que esta pequeña cabaña estaba a sólo diez metros de la residencia Ootori.
*
Unos treinta minutos después de haber sido salvados, Keiki se estaba calentando frente a la estufa dentro de la sala de estar, y Sayuki regresó, después de haber terminado su baño.
"Fuu. Un baño caliente después de perderse en el bosque es lo mejor."
"Qué irónico, ¿eh?"
"¿Qué pasó con Mizuha-san y las demás?"
"Están sacando los ingredientes para la cena. Aparentemente hay un supermercado a pocos minutos."
"Oh, ¿en serio? Ah, el baño está libre, así que no dudes en usarlo.”
"Gracias~"
"Gracias por dejarme ir primero."
"'Las damas primero', como dicen."
Keiki subió las escaleras a su dormitorio, tomó un cambio de ropa, y se dirigió al baño. Mientras se envolvía en el relajante olor del agua tibia, se quitó la ropa. Cuando pasó por el espejo en el vestuario, recordó lo que pasó en la cabaña.
"Sayuki-senpai seguro que era hermosa..."
La suavidad de su piel, su dulce aroma... Todo vino corriendo a la mente de Keiki.
"... No es bueno." Forzó su cabeza a salir de estos pensamientos impuros.
Si se desviara más, las cosas se volverían incómodas una vez que volviera a ver a Sayuki. Por ahora, tomar un baño era lo primero, pensó, y se quitó el resto de su ropa y se dirigió al baño.
"Woah, esto es bastante grande."
El baño de la casa era un espectáculo para la vista. Era más de dos veces el tamaño de un baño familiar promedio. Tenía una bañera mucho más grande, que sería capaz de caber tal vez cuatro chicas al mismo tiempo. Después de que Keiki se lavara el cabello y el cuerpo con el champú proporcionado, se dirigió hacia el agua tibia. Un aroma lechoso llenaba la zona, lo que ayudó a Keiki a relajarse aún más.
"Ahhhh, volví a la vida..."
Keiki había estado cansado hasta los huesos después de perderse antes. El agua del baño sanó su agotamiento a un nivel en el que sentía que podía dormirse en cualquier momento.
"Oh, claro. Me pregunto qué hay para cenar hoy.”
"Haremos una paella."
"Ah, ¿En serio? Eso suena genial..."
......... ¿Hm?
"Si me disculpas~"
"... ¿Wueh? ¿Eh? ¡¿Mizuha?!"
La puerta se había abierto sin Keiki siquiera darse cuenta, y Mizuha entró. Y, por supuesto, estaba desnuda. Estaba cubriendo su cuerpo con una toalla de baño, pero eso no cubría exactamente mucho.
"¡¿Espera en un maldito segundo?!"
"¿Hm?"
"¡Estoy aquí! ¡Tomando un baño! ¡Ahora mismo!"
"Sí. Lo sabía antes de entrar".
"¿Acabas de admitir a tus crímenes?”
Qué giro tan ridículo de los acontecimientos. Ignorando el hecho de que esta no era ni siquiera su propia casa —No, incluso entonces sería raro— ella estaba irrumpiendo el baño de su hermano mayor durante tal situación. Eso fue demasiado atrevido incluso para Mizuha.
"Escuché que Nii-san estaba tomando un baño cuando volvimos de comprar, así que pensé que podría unirme a ti".
"¡Por favor, no!"
"¿Deberías estar diciendo eso? Si grito, las otras vendrán corriendo".
"¿Qué clase de amenaza se supone que es esa?"
¿Qué la hizo pensar en decir algo así?
"Así que espera un segundo hasta que lave mi cuerpo."
"... ¿Puedo irme primero?"
"¿Eh? ¿Dijiste algo en este momento?"
"Me preguntaba si podría irme primero."
"¿Hm? ¿Dijiste algo?"
"¡¿Eres una especie de NPC sordo?!"
Por los sonidos de la misma, Keiki no se le permitió salir.
¿Qué diablos está pasando?
Keiki se aseguró de que no vería nada dándole la espalda a su hermanita. Eso eliminaba el riesgo, sí, pero...
El sonido de la ducha detrás de mí todavía lo hace excitante...
El sonido del agua golpeando el suelo hizo cosquillas en los oídos de Keiki. Debido a que había evitado su campo de visión, sus oídos deben haberse vuelto más sensibles. Dentro de su cabeza, Keiki cantó Mizuha es mi hermanita. Mizuha es mi hermanita. Eventualmente los sonidos del agua se detuvieron y Mizuha caminó hacia Keiki con la toalla de baño envuelta a su alrededor. Sin reservas de ningún tipo, se sentó frente a su hermano mayor.
"... Ah, esto se siente genial, ¿verdad?"
"¿S-Si?"
"¿Por qué no me miras?"
"Bueno, pensé que sería malo si veía demasiado..."
"Puedes ver si quieres. Ya estoy hasta los hombros en el agua, y la sal de baño hace que sea difícil de ver, ¿verdad?
"........." Keiki cedió a la lógica de Mizuha y se enfrentó a ella directamente.
Como ella había dicho, Keiki realmente no podía ver mucho debajo de sus hombros.
"Fufu. Finalmente me miraste."
"¿... Mizuha?”
La sonrisa que Mizuha le dio a Keiki le infligió una sensación de incomodidad. No parecía su habitual expresión relajada. Era más como si se estuviera forzando a sonreír.
"¿Qué pasa? Estás actuando rara, Mizuha."
"¿Rara? ... Sí, supongo que realmente estoy actuando rara en este momento.”
Cuando detuvo su falsa sonrisa, parecía una niña perdida.
"Oye, Nii-san. Hoy estaba muy asustada".
"¿Asustada de qué?"
"El clima en la estación de esquí se volvió malo muy rápido, y Mao-chan se fue con Yuika-chan adentro, pero Nii-san no volvió a casa... Y luego hablamos de cómo podrías haberte perdido en algún lugar... y Mao-chan dijo que deberíamos revisar la cabaña..." Ella se abrazó los hombros firmemente mientras hablaba.
"Mientras nos dirigíamos de vuelta aquí, estaba muy asustada... Asustada de que Nii-san... que incluso Nii-san desapareciera de mi lado.
"Mizuha, tú..."
La chica estaba llorando. La hermana pequeña de Keiki, que rara vez, si a caso, lloraba, ahora sostenía sus hombros temblorosos mientras grandes lágrimas redondas caían de sus mejillas y se desvanecían en el agua tibia. Cuando Keiki vio esa cara, comprendió el crimen que había cometido.
Soy un idiota.
Cuando Mizuha todavía era joven, perdió a sus verdaderos padres en un accidente. Ella sabía el dolor de no volver a ver a alguien precioso para ella. Y sin embargo Keiki le había hecho temer de verdad que una vez más.
"...! ¡Mizuha!”
"?!"
Antes de darse cuenta, ya estaba abrazando a la chica.
"Lo siento por hacerte preocupar..."
"Ah..."
Por un breve momento, no importaba que estuvieran desnudos en un baño. Keiki sentía que la chica se rompería si no hacía nada.
"Estoy a salvo, ¿de acuerdo? Definitivamente no te dejaré sola, así que... dejar de llorar, por favor.”
"... Nii-san."
"Lo siento, Mizuha."
"... Muy bien." El cuerpo de Mizuha se relajó en los brazos de Keiki. "Estoy muy contenta de que todos estuvieran bien..."
Debe haber estado preocupada incluso después de que Keiki y Sayuki fueran encontrados. Ella probablemente había venido a ver cómo estaba en el baño para tratar de hacer frente a esta ansiedad. Keiki decidió quedarse así hasta que su ansiedad desapareciera. Pasó el tiempo mientras abrazaba a su linda hermanita. Entonces sucedió.
"Keiki-kun..."
"Keiki-senpai..."
"Kiryuu..."
"¡¿Hah?! ¡¿Todas?!"
La puerta del baño se había abierto sin un sonido. Sayuki, Yuika y Mao estaban detrás de él.
"Tomar un baño con tu hermanita es una cosa, pero abrazarla mientras ambos están totalmente desnudos..."
"¿Tal vez Keiki-senpai es en realidad el mayor pervertido en el club de caligrafía?"
"Estás cruzando la línea que los siscons no deben cruzar aquí, Kiryuu."
"¡Esperen! ¡Tienen una idea equivocada sobre esto!" Keiki fue atacado por el miedo a la muerte y el ostracismo de la sociedad.
Se alejó de Mizuha mientras trataba de pensar en una excusa.
Sayuki habló. "No necesitamos excusas. Mizuha-san debe haber intentado seducirte de nuevo, ¿verdad? Ella dijo que iba al baño, pero nunca pensé que iba a tomar un desvío tan drástico.”
"Lo siento. Decidí tratar de seducir a Nii-san por un tiempo".
"¡¿Mizuha?!"
"Ah, pero Nii-san fue el que me abrazó."
"¡¿Aguanta?!"
"""......"""
Cuando oyeron estas palabras, las miradas de Yuika y las demás se volvieron más frías que cualquier ventisca. Lo que empeoró aún más las cosas fue que Keiki no podía defenderse, ya que era la verdad.
"¿... Hey Keiki-kun?”
"Sí."
"Sólo porque ustedes dos sean un siscón y brocon no significa que puedan tomar baños juntos para siempre, ¿de acuerdo?"
"De hecho." A Keiki no se le ocurrió nada más que decir.
Por supuesto, tomó mucho tiempo aclarar este malentendido.
Terminaron de comer su cena hecha por la chef maestra Mizuha, jugaron algunos juegos de cartas en la sala de estar, hablaron de esto y a eso, y finalmente todos se dirigieron a sus habitaciones individuales. Como tenían tres habitaciones para dormir, se dividieron en parejas como lo hacían durante el campamento de verano. Keiki dormía solo, Sayuki y Yuika estaban en una habitación, y Mizuha y Mao estaban en la otra.
Keiki apagó la luz en su habitación y se acostó boca arriba en su cama, pensando en lo que había sucedido ese día.
"Al final, no pude pensar en cómo responder..."
Los incidentes con Sayuki y Mizuha fueron demasiado agitados, y Keiki no tuvo tiempo de llegar a su respuesta a las confesiones.
"... ¿Hm?"
El smartphone de Keiki vibró. Se dio la vuelta en su cama y encontró un solo mensaje no leído.
"¿Nanjou?"
El remitente resultó ser Nanjou Mao. El mensaje decía:
'¿Puedes venir a l balcón ahora mismo?'
"¿Qué quiere a esta hora?"
Ella no mencionó la razón, pero Keiki no podía dormir de ninguna manera, así que no le importaba. Keiki se puso una sudadera con capucha y se fue al balcón. Cuando caminó por el pasillo y abrió la puerta, fue recibido por la chica, con el pelo hacia abajo, con un cárdigan. Ella se dio la vuelta para verlo, dando un 'Que tal' tranquilo como un saludo.
"Me alegro de que aún estés despierto."
"Sí, realmente no podía dormir. ¿Cómo está Mizuha?"
"Ella se durmió de inmediato."
"Ya veo."
"Debe haber sido un verdadero shock para ella escuchar que te perdiste."
"Eso parece."
"No preocupes demasiado a Mizuha, ¿de acuerdo?"
"Lo sé. Estoy reflexionando sobre ello.”
Esta vez tuvieron suerte. La próxima vez, las cosas podrían no terminar tan felizmente. Si Mizuha fuera la que hubiera terminado perdida, Keiki probablemente se habría vuelto loco.
"Bueno, no fue culpa de nadie, así que no tiene sentido pensar en ello."
"Sí, gracias."
"Está bien. Somos buenos amigos después de todo, Kiryuu.” Mao dijo indiferentemente.
Cuando Keiki la oyó decir eso, se sintió aliviado.
"Oh, sí, ¿Tienes alguna razón por la que me llamaste aquí?"
"Ah, así es..." Mao de repente empezó a inquietarse. "Quiero que eches un vistazo a esto, Kiryuu..."
"¿Hay algo que quieras mostrarme?"
"Esto..." Mao le dio a Keiki su teléfono inteligente.
Reflejado en la pantalla del teléfono bajo la noche estrellada había una portada familiar de revista.
"Salió hoy. La revista que tiene mi única muestra."
"¿Oh? ¿En serio?”
"Es sólo la versión digital. No pude llevar la copia física conmigo".
"Está bien. Lo compraré yo mismo una vez que volvamos."
"Gracias."
"¿Así que esto tiene el manga en el que estabas trabajando antes?"
"Síp. La que terminé cuando me ayudaste".
Debe haber sido alrededor del final del festival deportivo. El primer manga de Mao para la revista había sido rechazado, lo que puso a Mao se deprimiera. Keiki la ayudó a recopilar datos, y se habían quedado en un hotel. Esa noche, Mao terminó el manuscrito.
"Hice varios cambios después de eso con la ayuda de mi editor, así que tomó algún tiempo".
"Ya veo."
"Pero fue divertido. Cada vez que lo arreglaba, se volvía cada vez más interesante. Aunque estuve muy cerca de quedarme sin tiempo al final".
"Oh, sí, has estado muy ocupada últimamente."
No sólo estaba el manga BL en su agenda, sino que también tuvo que centrarse en el Oneshot para la revista.
"Ya hay muchas críticas. Acabo de revisarlos."
"Y?"
"Je je, ¿Qué te parece?"
Keiki podía adivinar, gracias a su sonrisa confiada.
"Todo fue genial. Hasta mi editor me elogió. Me dijeron que una serialización podría no estar muy lejos a este ritmo".
"¿En serio?!"
“¡En serio. Y todo es gracias a Kiryuu!”
"¿A mí?"
"Yo pude hacerlo porque te quedaste conmigo. Pensé que había terminado para entonces, pero me alegro de haber seguido adelante"
"Ya veo..."
"Así que gracias. Me alegro mucho de que nos conociéramos".
"Ya veo..." El corazón de Keiki saltó de un latido cuando vio la sonrisa extrañamente inocente de la chica.
Keiki sabía que hizo mucho. Sólo la había ayudado un poco, y la mayor parte de esto fue gracias a su arduo trabajo. Pero se sentía feliz sabiendo que pudo apoyar a la chica un poco.
"Si mi manga termina siendo serializado, será mejor que compres cien volúmenes, ¿de acuerdo?"
"No te adelantes allí... Pero definitivamente lo compraré". Dijo Keiki. Sentía que ella podría ser capaz de hacerlo.
Sabía que ella tenía suficiente talento bruto, y que ella tenía el deseo de mejorarse a sí misma.
"Ah, pero tampoco voy a dejar de ser una mangaka BL. Todavía necesito que coquetees con Akiyama más.”
"Tendré que declinar."
Toda esa charla seria de ahora se había arruinado. Pero Keiki se sintió aliviado al ver que Mao actuaba como su yo pervertido habitual.
... ¿Eh? ¿Por qué me siento aliviado?
¿Por qué Keiki se sentiría aliviado de que la chica se quejara como una pervertida? Este pensamiento pronto se convirtió en una fuerte sensación de incomodidad.
Me sentí tan triste cuando Yuika-chan y Sayuki-senpai dijeron que dejarían de ser pervertidas, pero me siento aliviado al escuchar que Nanjou seguiría siendo una mangaka BL...
Esa fue una clara contradicción.
No, fue raro desde el principio. Esperaba que las pervertidas se convirtieran en personas normales, pero no podía aceptar completamente a Yuika-chan actuando normalmente.
Se sintió feliz después de escuchar sus sentimientos. La dulce sensación en su pecho después de oír que estaban dispuestas a convertirse en chicas normales tampoco era falsa.
Entonces, ¿Por qué no pude elegir a ninguna de ellas?
¿Por qué Keiki no pudo encontrar una respuesta? ¿Por qué vaciló tanto tiempo? Si tan sólo tuviera una pequeña pista...
"¿... Nanjou?”
"¿Qué?"
"Si la persona que te gustaba no aceptara ese pasatiempo tuyo, ¿Te darías por vencida solo por la persona que te gusta?"
"¿Hah? ¿De dónde salió eso?"
"Sólo dime."
"¿Ehhh? Hmmm..." La chica lo pensó por un segundo, y finalmente hizo una expresión seria. "Cuando fuimos juntos al mar, estábamos mirando las estrellas, ¿verdad?"
"Sí, durante el campamento de verano."
"Se siente como si hubiera pasado tanto tiempo. Por otra parte, ha pasado medio año desde entonces.”
"Oh, sí, por el chocolate de Sayuki-senpai—"
"No vamos a hablar de eso, Kiryuu."
"... Correcto."
Keiki decidió no recordar la tragedia que había ocurrido.
"En ese entonces, te preguntaba qué pensarías si dejara de dibujar doujinshis BL, ¿verdad?"
"Sí, ahora que lo mencionas..." Keiki lo recordó débilmente.
Era una pregunta como si Keiki pudiera enamorarse de ella en ese escenario.
"No voy a bromear sobre eso por más tiempo. El BL es mi todo. Es mi razón de vivir".
Bajo el cielo estrellado, la chica hizo una sonrisa confiada y continuó.
"¡Es por eso que no voy a dejar de hacerlo, incluso para el chico que me gusta!"
"......"
Estas palabras se sentían como una estrella que caía en el pecho de Keiki. No hay necesidad de cambiarte a ti mismo, ni renunciar a las cosas que te gustan.
Las palabras de Mao se repitieron dentro de la cabeza de Keiki.
"Ah, finalmente entiendo..."
Todo estaba conectado dentro de su mente. La razón por la que no pudo responder a las confesiones de Yuika y Sayuki, y el origen de esa sensación sombría dentro de su pecho. Todo encajaba. La última pieza que necesitaba finalmente llenó el rompecabezas.
*
En la mañana de la nueva semana, Keiki se levantó de su cama y envió un solo correo electrónico. Lo mantuvo corto. "Por favor, vengan a la sala de la biblioteca hoy después de la escuela". Era hora de darle a su Kouhai una respuesta a su confesión.