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Capítulo 5: Los Pervertidos se Enamoraron taanto que salieron a una Cita Doble

Keiki acababa de darse cuenta de sus sentimientos por Mizuha. El detonante fue el viaje que hicieron el otro día. Mizuha había estado sufriendo de fiebre, y cuando se quitó la ropa para dejarle limpiar el sudor, él se vio afectado por su belleza. Trató de no pensar demasiado en ello, pero esta excitación dentro de él definitivamente no era algo que tendrías hacia la familia. Poco después, se dio cuenta de que había comenzado a ver a su hermana menor como miembro del sexo opuesto. 

Y una vez que Rintarou comenzó a acercarse a Mizuha más agresivamente, Keiki comenzó a sentir celos cada vez que se enteró de ello, o incluso cuando los vio juntos. Shouma dijo que era como si un padre tuviera a su hija siendo robada, pero eso fue incorrecto. De hecho, a Keiki simplemente no le gustaba que la chica por la que tenía sentimientos fuera cortejada. Después del día en que descubrió la identidad de Cenicienta, obtuvo una confesión de Mizuha, le robó su primer beso, e incluso desentrañó la verdad sobre que los dos no estaban relacionados por sangre, comenzó a hacerse cada vez más y más consciente de ella. 

Ella había cambiado de una linda hermanita a una chica que le interesaba. Al principio, se sorprendió. La chica que había visto sólo como una hermana menor era ahora un miembro del sexo opuesto. Su corazón corría cada vez que ella le mostraba su cuerpo desnudo, ardía de celos cuando hablaba con otro chico, y saltaba de alegría al ver su sonrisa feliz. Con todos estos sentimientos entrelazados, pronto se volvió incapaz de ignorarlos, y finalmente se vio obligado a aceptarlos. 

Después de recibir siempre afecto de Mizuha, Keiki se volvió incapaz de verla sólo como una hermanita. Incluso ahora, sólo verla le hizo querer abrazarla. Para sujetarla firmemente en sus brazos y besarla. Sin embargo, eso era imposible, ya que no estaban saliendo todavía. Como chico, intentaba contener todos sus deseos. Y sin embargo— 

"Zzz..." 

"Ella se mudó a mi cama de nuevo..." 

La chica de la que estaba tan consciente se había colado en su cama de nuevo. 

"Ella ha hecho esto todos los días últimamente..." 

Era el 15 de febrero, y Mizuha estaba durmiendo en la habitación de su hermano una vez más, usándolo como un dakimakura. Naturalmente, esta situación había ocurrido varias veces en el pasado, pero el número había aumentado significativamente en los últimos días. Todavía parecía estar obsesionada por esa vez Keiki terminó varado en las montañas nevadas, así que esto parecía ser una medida de seguridad para asegurarse de que no la dejaría como lo hicieron sus padres. 

Por supuesto, como un orgulloso siscon autoproclamado, esto era un honor para él, pero ahora que había llegado a entender sus sentimientos por ella, Keiki era más como un lobo hambriento. Keiki tuvo problemas para contenerse cuando la miraba estando indefensa de esta forma. 

"Ella ni siquiera sabe acerca de mis sentimientos. Ella está durmiendo tan felizmente..." 

Keiki sintió que había dicho eso antes. Eso fue justo después de que se enteró de la perversión de Mizuha. Keiki regresó de su baño y encontró a Mizuha durmiendo en su cama, y se quejó de que ella estaba tan indefensa. 

"No es justo. No puedo enojarme contigo cuando duermes tan cómodamente". 

Su cara dormida parecía angelical. Hizo que Keiki quisiera agredirla. Sin embargo, él aguantó estos deseos presionando su mejilla indefensa, y ella devolvió un lindo gemido. 

"Mmm... ¿¡Ah, Nii-san?” 

"Buenos días, Mizuha." 

"Buenos días, Nii-san." 

Todavía acostada en la cama, Mizuha le dio un saludo somnoliento. Grandes modales como siempre, incluso hacia la familia. Nunca hay nada malo con un apropiado saludo.” 

"Así que dime, ¿Por qué exactamente estás en mi cama?" 

"Porque quería acostarme con Nii-san." 

"Ya veo. Me gusta que seas honesta". 

"¿No te enojarás?" 

"Bueno, todavía hace frío afuera, así que un poco de calor extra no me molestará." 

"Fufu. Al final, sigues siendo amable con tu hermanita. Por eso te quiero, Nii-san." 

"Yo también te quiero, Mizuha." Se frotó suavemente la cabeza, y Mizuha sonrió felizmente en respuesta. 

Para ellos, 'te quiero' era un saludo normal, pero Keiki aún no había confesado este sentimiento floreciente dentro de su corazón. 

"Me encantaría quedarme así un poco más, pero llegaremos tarde a este ritmo". 

Mizuha se levantó de la cama, un poco a regañadientes. Llevaba una esponjosa pijama, no demasiado gruesa. 

" Voy a cambiarme y hacer el desayuno. Asegúrate de no dormirte de nuevo, Nii-san." 

"Entendido." 

Satisfecha por la respuesta de su hermano mayor, Mizuha salió de la habitación. Keiki la vio irse y suspiró. 

"Hombre, mi hermanita es muy linda..." 

Trató de mantener la calma, pero su corazón había estado corriendo todo el tiempo. Después de todo lo que había hecho, no podía quejarse exactamente, aunque Keiki no podía contenerse más. Se sentía como si mereciese elogios por no haber haberla asaltado. 

Aunque tal vez Mizuha podría estar bien incluso si lo hiciera... 

Después de todo, ella lo había invitado una vez antes, diciendo 'Vamos a tener sexo', así que eso tendría sentido. Parecía una chica tranquila y reservada en el exterior, pero podía ser bastante asertiva. 

"Ahora bien, ¿Cómo debo confesarme a Mizuha...?" 

Mizuha siempre había sido agresiva, siempre presionando a Keiki para que la aceptara. Para él, mencionar la idea de salir era más difícil de lo que había pensado. Al menos, confesarse aquí en la casa se sentía mal. Pero, ¿Dónde, cuándo y cómo debería hacerlo? Keiki había estado pensando en eso en los últimos días. 

Ese mismo día después de que terminaron las clases, estaba sentado en el aula 2B, hablando con Shouma y recibiendo consejos. 

"Así que me pregunto cuándo debería confesarme a Mizuha." 

"Todavía no se lo has dicho, ¿eh?" 

"Sí, ese es el problema." 

"Pero ella se te confesó, ¿verdad?" 

"Sí, ella siempre me dice lo mucho que le gusto." 

"Entonces, ¿Por qué te preocupas tanto por ello? Ambos se aman, así que díselo y ella será feliz. ¿No lo crees?" 

"Eso es cierto, pero..." 

"¿Todavía estás obsesionado con el hecho de que eres su hermano?" 

"Esa es una parte de esto, sí." 

Lo había pensado muchas veces, especialmente desde un punto de vista moral. Aunque sólo eran hermanastros, a los ojos de muchos, eran como una familia. Sería difícil afirmar con confianza que ningún obstáculo se vería en su camino. Ya que estaba mirando a su hermanita de esa forma, era un total fracaso como Onii-chan. Esto era definitivamente peor que las chicas del club de caligrafía llamándolo pervertido. Querer hacer de su hermanita su novia estaba cruzando la línea que ni los siscones deberían cruzar. 

"Al final, llegué a la conclusión de que, como no estamos relacionados por sangre, no hay ningún problema con ello. Olvida la moral o los ojos indiscretos de la gente que nos rodea. La quiero más de lo que valdría la pena ser sacudido por eso. 

El pensamiento negativo no lo llevaría a ninguna parte. Incluso si ese tipo de cosas se interponen en su camino, Keiki no podría renunciar a esperar una relación con Mizuha. 

"También podemos casarnos legalmente, así que decidí ir por ello". 

"¿Hmm? Ya veo" 

"¿Por qué sonríes?" 

"Quiero decir, has pensado lo suficientemente lejos para considerar el matrimonio." 

"Por supuesto. Eso es lo que viene con salir". 

"Eso es tan parecido a ti, Keiki. ¿Pero por qué no te has confesado todavía? ¿Viven juntos, así que no puedes confesarte cuando quieras?" 

"Bueno, no te equivocas, pero... ya que técnicamente puedo hacerlo en cualquier momento, estoy teniendo problemas para encontrar el momento adecuado para hacerlo... Y ya estoy feliz así, así que siento que terminaré atrapado si trato de llevarlo demasiado lejos". 

"—Hay muchas cosas de las que me gustaría quejarme con lo que has dicho, pero para resumirlo, tienes miedo de fracasar". 

"¿Hah? ¡Yuika-chan!” 

Keiki podía decir por voz solo que Koga Yuika estaba de pie detrás de él. Curiosamente, Shouma estaba bastante tranquilo al respecto. 

"Yo, Koga-san." 

"Ha pasado un tiempo, Akiyama-senpai." 

"¿Por qué se están saludando ustedes dos...?" 

Keiki tuvo que admirar a Shouma por no saltar en shock. 

"Realmente eres una persona indefensa, Keiki-senpai. Ni siquiera puedes confesarte, pero luego rechazas a Yuika porque tienes a alguien que te gusta. Eso es bastante patético." 

“Eso dolió..." 

"Así que la persona por la que tenías sentimientos era Mizuha-senpai, ¿eh?" 

"¿Lo has oído?" 

"Yuika sabe que eran más grande de lo que parecía al principio. Así que elegiste en función del tamaño de los senos". 

"Eso no fue todo, ¿de acuerdo?" 

¿Por qué todos asumieron que Keiki era un fanático de los pechos grandes? 

"Koga-san es del tamaño perfecto, si me preguntas." 

"Basta, Shouma. Yuika-chan ya está escondiendo sus pechos con sus brazos.” 

"Eres lo peor..." 

Por alguna razón, Keiki era a quien miraba. Qué irrazonable. 

"Entonces, ¿Por qué estás en las aulas de segundo año de todos modos, Yuika-chan?" 

"Me oculto del enemigo para vengarme..." 

"¿¡Hah!?" 

"No del todo. Yuika sólo quería ver a Keiki-senpai. Si ella no muestra su cara por aquí con suficiente regularidad, podrías olvidarte de ella.” 

"No soy tan olvidadizo." 

"¡Suficiente sobre eso! ¡Hablamos de lo muy cobarde que eras, Senpai! ¡Vé y confiésate a Mizuha-senpai para ser derrotado de una vez!" 

"¿Por qué es un hecho que seré rechazado...?" 

Eso honestamente hizo que Keiki sintiera que sus posibilidades de éxito se estuvieran malditas. 

"Creo que Koga-san tiene razón. Mizuha-chan es muy linda, así que si no te apuras, podría ser tomada por otra persona". 

"No suena imposible." Yuika asintió con la cabeza. "Mizuha-senpai es increíblemente popular después de todo." 

"Mitani-kun ha estado detrás de ella también." 

"Ah, Rintarou no es problema. Le dije a Mizuha que él sólo está en ella por sus pechos, así que ahora ella ni siquiera le dará la hora del día". 

"Así que eres el tipo de persona que recurre a ese tipo de trucos sucios, Keiki-senpai..." 

"No creo que sea un acto muy bonito, Keiki..." 

"No la voy a entregar a nadie que sólo esté tras ella por sus pechos." 

Keiki dejó a un lado cualquier culpa que le royera. Todos los insectos que apuntaran a su hermanita merecen ser aplastados. 

"... ¿Hmm? Así que te gusta Mizuha-senpai lo suficiente como para agacharte a tales métodos inhumanos. Ya veo..." 

"¿Es realmente tan inhumano?" 

"Ya que así es, Yuika no te detendrá más. Ella irá y le dirá a Mizuha-senpai 'Keiki-senpai es un maníaco de pechos pequeños', y luego—" 

"¡Por favor no!" 

"¡Hmph! ¡Keiki-senpai debe ser rechazado por Mizuha-senpai! ¡Y luego tener un collar puesto alrededor de su cuello por Yuika!” 

"¿Soy una especie de perro callejero?" 

Yuika escupió su veneno y se fue. Sin embargo, se detuvo justo en la entrada del aula. 

"... Pero si vas a confesarte, entonces Yuika sugiere invitarla a salir en una cita". Ella dijo con voz baja y salió del aula esta vez. 

"¿De qué se trataba eso?" 

"Siento que ella estaba tratando de ayudarte, Keiki." 

"¿Difundiendo información peligrosa?" 

"Probablemente quería entrometerse entre ustedes dos, pero imagino que creyó que eso te disgustaría." 

"Ahhh..." 

Eso tendría sentido. Enojarse con un solo respiro, sólo para darle consejos justo después. El corazón de una doncella es tan complicado como siempre, pero era una chica encantadora, sin embargo, es exactamente por esa contradicción. 

"Una cita suena como una gran idea, sin embargo." Keiki pensó. 

"Es bastante estándar, sí." 

"Eso significa que a tendré que llegar a una forma de invitarla." 

"... ¿Puedo irme a casa?" 

Después de separarse de Shouma, Keiki envió a Mizuha un breve mensaje ‘Vamos a casa juntos’. Poco después llegó la respuesta 'Claro' por lo que Keiki se dirigió a los casilleros de zapatos. Allí fue testigo de una escena peligrosa. 

"¡Mizuha-senpai, por favor ven a tomar un poco de té conmigo hoy!" 

"¿Eh? ¿Ehhh?” 

Keiki sintió que ya había visto la misma escena varias veces. Mizuha había terminado los preparativos para dirigirse a casa, sólo para que Rintarou comenzara a acortejarla. 

"Seguro que va a hacerlo esta vez. Mizuha ni siquiera sabe cómo reaccionar..." Keiki nunca había visto a su hermanita con una sonrisa tan irónica en su rostro antes. 

Pero Rintarou no retrocedió. 

"¿No está bien? En realidad, conozco una gran tienda que vende deliciosos dulces". 

"Pero..." 

"Es una tienda en la que me sentiría avergonzado de entrar solo, ¡Así que piensa en ello como salvar a tu lindo houhai!" 

"¿M-Mitani-kun...?" 

Rintarou ni siquiera dudó en agarrar la mano de Mizuha. 

"Gununu.." Keiki dejó salir un gruñido. 

Si era posible, no quería que nadie tocara a su preciosa hermanita, y ver más que esto era imposible para él de todos modos, así que se entrometió entre ellos dos. 

"Lo siento, Rintarou. Tenemos algunos planes después de esto". 

"¿Eh? ¿Kei-kun-senpai?” 

Keiki agarró el brazo de Rintarou, quitándolo de Mizuha. Puso su brazo alrededor del hombro de Mizuha. 

"Nii-san..." 

"Siento llegar tarde. Vámonos a casa, Mizuha." 

"Sí." Mizuha hizo una hermosa sonrisa y se acurrucó contra el brazo de Keiki. "Lo siento. Nii-san sólo se pondrá más celoso, así que tengo que rechazar tu invitación.” 

"Así es, así que nos vemos más tarde, Rintarou." 

"¿¡De ninguna manera ...!?" 

Cuando la chica fue arrebatada de él, Rintarou se puso pálido mientras miraba a Keiki. Si tan solo se rindiera aquí entonces. 

"... No es justo.” 

"¿Hm?" 

"¡No es justo, Kei-kun-senpai! Yo también... ¡También quiero que mi brazo esté rodeado por los pechos de Mizuha-senpai!" 

"Realmente eres lo peor..." 

Hay cosas que no deberías decir en voz alta. Si Airi hubiera estado presente, ella le daría una mirada de muerte y le diría algo como 'Esta es la razón por la que los hombres son los peores'. Por suerte no estaba presente. 

Dejaron la escuela detrás de ellos y caminaron por la calle naranja carmesí. Mizuha habló. 

"Gracias por salvarme. No sabía qué hacer". 

"No voy a entregarle mi linda hermanita a un pervertido como ese." 

"Sí, sólo estaba mirando mis pechos." 

Por supuesto, no es que Keiki no entendiera los sentimientos de Rintarou. Keiki tuvo que respetar sus gustos como catador de pechos sin igual. Yuika tenía pequeños y lindos baches, Sayuki ofreció un volumen sin fin, Ayano tenía una gran forma, y no había demasiado, y Mao tenía el mejor equilibrio. Todos tenían sus propios atributos que las hacían buenas, pero el tamaño oculto de Mizuha era el mejor de todos. Cuando usaba ropa, no ofrecía mucho, pero una vez que se quitaba la ropa, la diferencia era visible. 

"Eso me recuerda que el examen de Tokihara-senpai fue hoy, ¿verdad? Me pregunto si ella va a estar bien.” 

"Probablemente. Ella es muy inteligente, incluso si no lo parece.” 

"Ella no ha ido a la escuela en mucho tiempo, así que realmente se siente como la temporada de exámenes". 

"Sí..." 

"¿Te sientes solo sin Tokihara-senpai?" 

"Bueno, por supuesto. Ella era la creadora del humor en el club.” 

"Hay un montón de chicas tranquilas en el club de caligrafía, ¿no?" 

Mao siempre estaba trabajando, Yuika era un tipo reservada, y los hermanos Kiryuu siempre tenían sus propias cosas en las que trabajar. En ese sentido, Sayuki era la persona más alegre del club. 

"Tienes que trabajar duro como el próximo presidente del club, Nii-san." 

"Si no muestro algunos resultados, el club podría incluso ser abolido. En el peor de los casos, tal vez no consigamos nuevos miembros, así que tendré que practicar mi caligrafía". 

Era fácil de olvidar ahora que Sayuki se había ido, pero Keiki y las chicas todavía eran parte del club de caligrafía. No era parte de su agenda dibujar manga BL, dibujar libros ilustrador que no deberían ser leídos por niños, o investigar escenas sugerentes que resaltaban en bragas. 

"Bueno, me ocuparé de ese problema con el tiempo." 

"Así es. Por ahora, sólo tenemos que preocuparnos por la cena de hoy". 

"Eso suena como un problema difícil." 

"¿Hay algo que te gustaría comer?" 

"Voy a pensar en ello." 

Mientras tenían esta conversación, llegaron a un semáforo en rojo. Mientras esperaban, Mizuha respiró un poco de aire caliente en sus manos frías. 

"Ah..." Cuando se dio cuenta de que Keiki estaba mirando, dejó salir una risa avergonzada. "Ajaja, hace mucho frío hoy. Debería haber traído algunos guantes.” 

"Cierto..." 

Hace mucho frío hoy. Las manos de Mizuha estaban rojas. 

"Mizuha, ¿Qué tal si me prestas tu mano?" 

"Eh, ¿Por qué?" 

"Sólo hazlo." 

"Bien..." Ella a regañadientes le ofreció a Keiki su mano izquierda. 

Keiki lo agarró con la mano derecha. 

"¿N-Nii-san?" 

"Esto es mucho más cálido, ¿verdad?" 

"Pero... la gente que nos rodea nos verá..." 

El semáforo se había vuelto verde mientras tanto, y la gente que pasaba por ahí les dio miradas dudosas. Podría ser raro que los hermanos se tomen de la mano mientras están en la preparatoria. E incluso si la gente a su alrededor no supiera acerca de su relación, probablemente todavía sería incómodo para ella. Probablemente por eso había continuado ocultando sus sentimientos por Keiki todo este tiempo. Dicho esto, ya que Keiki quería convertirse en novio, no podía ceder ante un obstáculo tan menor como éste. 

"Quiero tomarte de la mano, Mizuha." 

"Nii-san..." 

Los ojos de Mizuha se abrieron de par en par. Después de un poco de vacilación, ella le dio una sonrisa compleja. 

"No se puede evitar, entonces." 

Con esto, la nube que cubría su corazón parecía ser borrado momentáneamente. Ahora que Keiki había recibido permiso, los dos comenzaron a caminar a través del paso peatonal. 

"Eso me recuerda, Mizuha. Creo que una olla caliente podría ser agradable para la cena.” 

"Bien, voy a hacer eso entonces." 

Empezaron a hablar de qué ponerle en la olla caliente, qué ingredientes serían los mejores, y cuál sería el más barato. Mientras regresaban a casa, algunas personas les dieron varias miradas curiosas, pero ni una sola vez soltaron sus manos. 

*** 

Desde ese día, Mizuha había estado de buen humor. Puso mucha carne en la olla caliente. Dejaba que Keiki viera el programa de televisión que quisiera ver. Después de su ducha, ella le daba una almohada de regazo y le limpiaba las orejas. Sin embargo, la influencia de su buen humor llegó incluso fuera de casa. 

"¿¡Una marca de corazón...!?" 

Cuando Keiki abrió la tapa de su almuerzo durante el almuerzo, fue recibido con una marca de corazón dibujada en el arroz. Shouma le dio un vistazo y sonrió. 

"Realmente eres amado, Keiki." 

"Gracias a alguien." 

"Cuando miras eso, parece que Mizuha-chan está de buen humor. ¿Ha habido algún progreso o algo así?" 

"Sí. Nos tomamos de la mano ayer.” 

"¿Eh, sólo eso?" 

"Incluso si somos cercanos, seguimos siendo hermanos. Normalmente no haríamos nada así". 

"Ahh, ya veo. Eso explica por qué ha estado en las nubes". 

Bueno, habían estado coqueteando bastante peligrosamente dentro de casa. Keiki prefirió guardar silencio sobre la limpieza des oído por ahora. 

"Quiero invitar a Mizuha a salir en una cita, pero ¿Qué crees que deba hacer?" 

"¿Sólo hazlo normalmente?" 

"Por supuesto. Pero hay muchas maneras de hacerlo, ¿verdad? ¿Hay algún tipo de técnica de fuego seguro o algo así...?" 

"—No, no hay nada conveniente como eso. Sólo invítala a salir." 

"¿¡Auch!? ¿¡Nanjou!?" 

Nanjou habló de repente desde detrás de Keiki. Yuika y Mao habían sido tan sigilosas como los asesinos últimamente. 

"¿Hmmm? Una marca de corazón en tu almuerzo... parece que va bien". 

"Bueno, sí." 

"¿Y qué? ¿Quieres invitarla a salir a una cita?” 

"Así que estabas escuchando..." 

"Quiero decir, estabas hablando dentro de la clase... Aunque no creo que nadie más que yo realmente lo haya escuchado.” 

"¿Por qué nos espiarías...?" 

"¡A quién le importa eso!" 

Mao evitó su rostro con ira. 

Shouma estaba tratando desesperadamente de contener su risa. 

"Akiyama ya dijo esto, pero invitarla a salir normalmente es tu mejor opción, ¿verdad? ¿Por qué probar alguna otra estrategia arriesgada?" 

"Porque no quiero fallar... E invitarla a una cita es súper vergonzoso..." 

"¿Qué eres, una doncella enamorada? No te acobardes así, Kiryuu." 

"No me llames cobarde." 

Dicho esto, Keiki era consciente de ello. No quería hablar de eso por esa precisa razón. 

"Por cierto, tengo una idea para ti, Cobarde." 

"Una vez más, no me llames cobarde." 

"Hay una gran forma de invitar indiferentemente a una chica a salir. ¿Quieres saber cual es?" 

"¿¡Realmente hay un método conveniente como ese?!" 

"Claro que lo hay, pero no tengo ninguna razón para ayudarte con tu vida amorosa, ¿Verdad?" 

"Ugh..." 

Eso era absolutamente cierto. Keiki no podía pedirle ayuda a la chica que había rechazado. 

"Bueno, no me importa decirte. Peeero va a haber una condición.” 

"... ¿Cuál es su condición?" 

"Quiero una foto tuya y de Akiyama coqueteando." 

"Trato." 

"¿Espera? ¿Qué hay de mi opinión?" Shouma preguntó. 

"Así que Nanjou, ¿Serías tan amable de decirme?" 

Keiki lo ignoró por completo. En este momento, encontrar un método para invitar a una chica en una cita era más importante que su orgullo. Mao asintió en respuesta de manera satisfecha, y habló con un tono ligero. 

"Ya tienes un amigo con una novia, así que ¿Por qué no ir a una cita doble? Akiyama con la Maestra Koharu, y Kiryuu con Mizuha." 

*** 

El domingo siguiente, era el tiempo perfecto para una cita. Keiki y Shouma estaban esperando a sus compañeros de cita en la plaza frente a la estación de tren. 

"La última vez que fui a una cita doble contigo fue con Tokihara-senpai cuando fuimos a los bolos, ¿verdad?" 

"En ese entonces estaba ayudando a Koharu-senpai sin embargo." 

"Sé que no es un gran favor, pero hoy, Koharu-chan y yo seremos tus asistentes." 

"Muchas gracias." 

Gracias a la idea de la doble cita, invitar a Mizuha a salir había sido mucho más fácil. Después de todo, ni siquiera necesitaba usar la palabra 'Cita'. En cambio, simplemente tenía que decir '¿Qué tal si vamos a divertirnos con Shouma y Koharu-senpai?', y eso hizo el trato. 

"Koharu-senpai sabe que tengo sentimientos por Mizuha, ¿verdad?" 

"Le dije de antemano, sí. ¿Estuvo bien?" 

"Sí, no es algo que valga la pena esconderse." 

Koharu era alguien que había ayudado mucho a Keiki en su búsqueda de Cenicienta. A menudo le pedía consejos, así que tenerla de su lado era tranquilizador. 

"Por cierto, ¿Por qué los chicos y las chicas se agrupan por separado?" 

"Koharu-chan se está encargando de la coordinación de la ropa de Mizuha-chan parece." 

"¿En serio?" 

"Creo que puedes estar emocionado hoy. Koharu-chan tiene un gran sentido de la ropa.” 

"Ahora has levantado mis esperanzas." 

Mizuha ya tenía un gran estilo, y siempre llevaba ropa elegante, pero los resultados deben ser aún mejores si el propio sentido de Koharu se añadía a eso. 

Supongo que no tengo que preocuparme de que Mizuha venga sin bragas. 

Sabiendo esto, Keiki no tenía que ser muy sensible sobre la situación de la falda de Mizuha. 

"Oh, parece que la actriz principal de hoy ha llegado." 

Keiki levantó la cabeza cuando Shouma dijo eso, y vio a dos chicas caminando hacia ellos. 

"Gracias por esperar." Una de ellas era una pequeña chica con el cabello elegante. 

Koharu llevaba pantalones militares con una sudadera con capucha, manteniendo una mirada bastante infantil mientras daba un saludo. 

"E-Estamos aquí..." Mizuha hizo una sonrisa avergonzada mientras miraba a su hermano. "¿Cómo... está? 

La blusa que llevaba tenía volantes, y llevaba un vestido de suéter con un cárdigan en la parte superior. 

"C-Creo que te ves muy linda..." Keiki estaba tan sorprendido por su apariencia que terminó usando un educado discurso. 

Como siempre llevaba ropa adulta y encantadora, verla con un lindo estilo como este se sentía fantástico. La hizo parecer más joven, era completamente diferente de su atmósfera habitual, e hizo correr el corazón de Keiki. 

"Pensé que ropa linda como estas podrían ser un gran cambio para Mizuha-san, por lo que elegí estas." 

"Eres un genio, Koharu-senpai." 

Keiki estaba tan desconcertado por esta coordinación celestial que subconscientemente se encontró frotándole la Koharu en la cabeza. 

"Ejeje, es vergonzoso. Pero Shouma-kun se pondrá celoso, así que mantén las palmaditas en la cabeza a una cantidad moderada, por favor." 

"Te daré todas las palmaditas que quieras más tarde, así que no me importa." Shouma sonrió. 

"Los dos no son justos, quiero frotarle la cabeza de Senpai también." Mizuha se quejó. 

"¿P-Por qué están todos tan ansiosos de frotarme la cabeza?" 

Porque Senpai es pequeña y linda. Los le frotaron mucho la cabeza a la loli legal, y- 

"Ya que todo el mundo está aquí, ¿Por qué no nos vamos ahora?" 

Con la señal de Shouma, el grupo comenzó a moverse. 

Los cuatro usaron trenes y autobuses para llegar al parque de atracciones. Era el mismo parque de atracciones que Keiki había visitado con Sayuki cuando todavía estaba buscando a Cenicienta. Había elegido este lugar porque Koharu tenía boletos, ya que ella era la heredera un CEO rico de una compañía que tenía vínculos con el lugar. 

"Ha pasado mucho tiempo desde que vine al parque de diversiones." 

"Concuerdo. Bueno, ¡Disfrutemos de este día tanto como podamos!" 

Mizuha y Shouma estaban hablando entre sí mientras miraban a través del folleto. Detrás de ellos estaba Keiki, hablando en silencio con Koharu. 

"Lo siento por hoy. Por arrastrarte a esto." 

"Está bien. Terminé todos mis exámenes, así que me alegro de que me hayas invitado". Ella sonrió y volvió su mirada hacia Mizuha. "Así que te gustó Mizuha-san después de todo." 

"Sólo me di cuenta hace poco, sin embargo." 

"Mizuha-san es una persona maravillosa, así que puedo entender cómo te enamoraste de ella. Cuando Shouma-kun y yo estábamos en una pelea, ella estaba tratando de juntarnos de nuevo". 

"Sí..." 

Cuando Shouma había mirado demasiado fijamente a una niña de primaria real, Koharu se lo había tomado muy difícil, razón por la cual las cosas terminaron incómodas entre ellos. En ese entonces, Mizuha intentó todo lo que pudo para que se reconciliaran. 

"Tanto Kiryuu-kun como Mizuha-san son preciosos amigos míos. Por eso quiero que sean felices también". 

"Koharu-senpai..." 

Incluso si no estuvieran relacionados por sangre, todavía eran hermanos. Esta emoción que Keiki sintió hacia Mizuha definitivamente no era normal. Aun así, habían personas que los apoyaban. Sólo la idea de eso hizo que el pecho de Keiki se llenara de una sensación cálida. Tenía que trabajar duro hoy para no decepcionarlos. 

"Entonces, ¿A dónde deberíamos subirnos primero?" Justo cuando terminaron su charla secreta, Shouma habló. 

"¿Hay algo que te gustaría probar, Mizuha?" Keiki preguntó. 

"Estoy bien con cualquier cosa. ¿Qué hay de ti, Ootori-senpai?” Mizuha miró a Koharu. 

"Entonces, ¿Por qué no empezamos con una montaña rusa?" Koharu sugirió. 

"Estoy bien con eso, pero ¿Eres lo suficientemente alta como para alcanzar la altura mínima, Koharu-senpai?" 

"¡No soy tan pequeña!" 

Tal como ella dijo, no tuvieron problemas para entrar, y después de hacer fila durante unos minutos, llegó su turno. A diferencia de antes, un viento frío sopló sobre la cara de Keiki, pero como llegó a disfrutar de la cara de Mizuha junto a él, no fue tan malo después de todo. 

"Eso fue divertido, ¿no, Mizuha-san?" 

"Sí, eso fue increíble." 

Parece que tanto Koharu como Mizuha habían tomado un gusto por esta atracción. Estaban hablando alegremente al respecto. Los chicos estaban observando desde la distancia, sonriendo el uno al otro. 

"¡¡Ah, Shouma-kun, tienen una estatua de bronce de la mascota de allí!" 

"Sí, vamos a echar un vistazo." 

"Nii-san, ¿Deberíamos ir también?" 

"Claro." 

Los cuatro disfrutaron del parque de atracciones en grupo. Probaron las galerías de tiro, veían una obra con la mascota y se tomaron muchas fotos juntos. Incluso hicieron que Koharu se sentara en los caballitos sola y la vieron como si fuera su hija, mientras le tomaban fotos. 

"Ohh, ¿Siempre tuvieron una casa embrujada aquí?" 

Un poco después del mediodía, Keiki vio un edificio que parecía un hospital abandonado. 

"Parece que se ha construido recientemente." 

"Hah." 

Shouma dio una breve explicación con la ayuda del panfleto, pero como se veía terriblemente deteriorado, no desató esa sensación en absoluto. De hecho, parecía una casa embrujada donde algo podía saltar sobre ti en cada esquina. 

"Esto seguro que da vibraciones espeluznantes." 

"Y que lo digas." 

"¿Por qué no lo probamos?" Koharu miró a Keiki mientras decía eso. 

Traduciéndolo, eso significaba '¡Esta es tu oportunidad de mostrar lo varonil que eres!'. 

"Mizuha, ¿No eres mala con este tipo de cosas?" 

"No estoy muy cómoda con ello, pero me gustaría probarlo." 

"La última vez que dijiste eso antes de una película de terror, no podías dormir toda la noche". 

"Está bien. Puedo hacerlo hoy". 

"Bueno, si tú lo dices." 

Ahora que se decidió, el grupo decidió desafiar a la casa embrujada. Dado que esta atracción estaba destinada a que la gente fuera en parejas, Shouma y Koharu entraron primero, y después de un poco de espera, Keiki y Mizuha siguieron. 

"Esto parece realista..." 

"Creo que la historia de fondo es que las enfermeras y los médicos se sobrecargaron y murieron en el proceso, lo que hizo que se volvieran fantasmas". 

El escenario en sí ya era bastante aterrador, pero la atención al detalle en este hospital hizo que pareciera aún más realista. La pintura en las paredes se había desgastado y estaba cayendo hacia el suelo, había muñecas espeluznantes sentados en la recepción, la sala de espera tenía un ambiente espeluznante, y una sensación aterradora se infundía en ti con sólo de caminar por el pasillo. 

Honestamente, esto es bastante malo. Siento como si algo fuera a saltar sobre mí en cualquier momento. 

La casa embrujada en el festival de cultura ya era aterrador, pero no podía llegar a la altura del trabajo de un profesional. Keiki ya tenía ganas de llorar, y ni un solo fantasma había aparecido hasta ahora. 

"Nii-san..." Incapaz de soportar la atmósfera, Mizuha se aferró al brazo de Keiki. 

Y entonces, empezó a hablar, como si odiase el silencio. 

"Nii-san, algo anda mal..." 

"¿Eh? ¿Q-Qué cosa?" 

"Siento algo ventoso tocando mis piernas..." 

"¿Hah...?" Keiki subconscientemente se detuvo en sus huellas. 

Pensó que ella sólo estaba tratando de burlarse de él, pero cuando miró su cara pálida, ella aparentemente no estaba bromeando. 

"Casi como si algo invisible estuviera dentro de mi falda. Hay una mano fría tocando mi piel..." 

"¿E-Eso es...?" 

"Y me di cuenta de por qué..." 

"... ¿Q-Qué es?" 

Parecía que el problema era la propia Mizuha, en lugar del ambiente. Y después de un breve silencio, Mizuha explicó cuál era esta cruel realidad. 

"No estoy usando bragas hoy." 

"... ¿Qué dijiste?" 

Keiki esperaba algo más, pero eso era aún más aterrador que cualquier cosa que se le hubiera llegado. Frente a esta repentina revelación, Keiki sintió que su sangre se congelaba. 

"Eh, ¿Por qué? ¿Por qué no llevas bragas?" 

"Porque me olvidé por completo de usarlas, Tehe~" 

"'Tehe', mi trasero!" 

Keiki había bajado la guardia. Esperaba que sólo una pervertida como Sayuki viniera a un parque de diversiones sin usar bragas. La criatura más aterradora de esta casa embrujada no era un fantasma, sino la propia Mizuha. Con sólo ver su falda revoloteando con una brisa débil, el corazón de Keiki estaba a punto de saltar de su pecho. Y ese no fue el único problema, ya que apareció la primera enfermera empapada de sangre. 

"Los matareeeeeee..." 

"¿¡Kyaaaaa!? ¿¡Un fantasmaaaa!?" 

"¡¡Mizuha!! ¡Tu falda, tu faldaaaaa!" 

Entonces comenzó el verdadero horror, y no de una manera que Keiki anticipó. Keiki estaba tan concentrado en la falda de Mizuha que el resto del ambiente ni siquiera entró en su mente. Cada vez que Mizuha se asustaba por un fantasma, Keiki comenzaba a gritar por una razón completamente diferente. 

Más tarde, se encontraron en la plaza de la fuente dentro del parque de atracciones. Keiki se sentó en un banco, viendo a la gente pasando, y Mizuha vino corriendo hacia él desde la casa embrujada. 

"Gracias por esperar, Nii-san." 

"¿Las llevas ahora?" 

"¡Sí! ¿Quieres comprobarlo?" 

"Pasaré, así que ni siquiera pongas las manos en tu falda." 

La chica se quitó las manos de la falda a regañadientes. Después de que llegaron a salvo a través de la casa embrujada, Keiki presionó a Mizuha para ponerse bragas. Por suerte, tenía un par con ella, así que rápidamente se fue para ponérselas. Ahora Keiki ya no tenía que preocuparse por su falda revoloteando. 

"¿Dónde están Shouma-kun y Ootori-senpai?" Ella preguntó. 

"Fueron a buscar asientos en la feria de comida." 

Dijo que la feria de comida estaba un poco lejos de ellos. Naturalmente, no podía decirles a los dos que Mizuha no llevaba bragas, así que les dio una vaga razón y les pidió que se adelantaran. 

"Además, ¿Por qué no usaste bragas?" 

"Escuché tu petición, así que me retuve de salir sin usar ninguna." 

"Entonces, ¿Por qué ahora?" 

"Me imaginé que ir sin bragas es una etiqueta exhibicionista básica." 

"¿¡Qué clase de conciencia profesional es esa!?" 

"... Y también estaba mi deseo de querer ser detenida de antemano.” 

"Hah, ¿Qué quieres decir?" 

"Todo es culpa tuya, Nii-san." 

Mizuha no aclaró más allá de eso, ella sólo sacó su lengua de una forma linda. "Tenemos que darnos prisa o haremos esperar a los demás." 

"... Cierto." 

Parecía que Mizuha quería decir algo, pero Keiki no quería que Shouma y Koharu esperaran, así que se rindió. Por ahora, pensó que deberían juntarse y almorzar. Con esto en mente, Keiki se levantó del banquillo. Al mismo tiempo, un pequeño chico corría a cierta distancia de ellos. Pasó a Keiki, y justo cuando iba a pasar a Mizuha, sus churros se atascaron en la falda de Mizuha. 

Esta vez son churros, ¿eh? 

La última vez, una varita mágica se atascó en la falda de Sayuki. Hizo que Keiki se sintiera como si estuviera experimentando el deja-vu. 

"¿¡Hya!?" 

"¿¡Mizuha!?" 

Antes de darse cuenta de lo que estaba haciendo, su cuerpo se movió en reflejo. Justo antes de que la falda se levantara lo suficientemente alto como para revelar la ropa interior, Keiki se aferró a ella y empujó la tela hacia abajo. 

Lo hice justo a tiempo... 

De alguna manera se las arregló para evitar el peor de los casos. Ahora se dirigían miradas aún más curiosas hacia ellos en comparación con el otro día cuando llegaron a casa juntos, pero valió la pena proteger el honor de la chica. 

"¿N-Nii-san...?" 

"Ah, lo siento." 

Al escuchar la voz desconcertada de su hermana menor, Keiki dejó ir a Mizuha. 

"Estaba preocupado por tu falda, así que..." 

"Ah, sí... gracias, Nii-san." Mizuha le dio las gracias con una sonrisa, pero el ambiente incómodo no desapareció. 

¿Sus mejillas estaban rojas porque de repente le di un abrazo? Algo similar había sucedido antes cuando fue a la escuela sin bragas. Debido a la brisa, su falda estaba casi levantada, por lo que Keiki la abrazó para presionarla. Sin embargo, en ese entonces, su deseo de proteger su dignidad como hermano mayor era la razón más grande. Ahora, sintió celos hacia cualquiera que pudiera ver las bragas de Mizuha. 

¿Cuánto me gusta esta chica...? 

Había abrazado a la chica debido a motivos tan simples. Fue una gran sensación para Keiki. 

*** 

"Así que vamos a salir por nuestra cuenta ahora, Kiryuu-kun." 

"Rezo por tu éxito." 

"Sí, gracias, ustedes dos." 

Aproximadamente a las 5 de la tarde, Keiki salió de la tienda de recuerdos mientras hablaba con Shouma y Koharu. Todo lo que quedaba para el día era confesársele a Mizuha, así que Keiki tenía que animarse y hacerlo él mismo. 

"Nii-san, gracias por esperar... Espera, ¿Adónde fueron Shouma-kun y Ootori-senpai?" 

"Ahh, van a ir a otro lugar lejos de nosotros." 

"¿Lo harán?" 

"Como ya están aquí, querían pasar las últimas horas solos, ya sabes". 

"Ah, sí, eso tiene sentido." Mizuha asintió con la cabeza. 

Gracias a que salieron, Keiki tenía una excusa conveniente para estar a solas con Mizuha. 

"Realmente eres considerado, Nii-san." 

Sin mencionar que su evaluación había aumentado en el proceso. Se sentía un poco culpable ya que todo era para que Keiki y Mizuha pudieran estar solos juntos. 

"Entonces, ¿Qué deberíamos hacer? Deberíamos ser capaces de subirnos a algo más" 

"Tiene que ser eso, ¿verdad?" 

"¿Eso?" Mizuha inclinó la cabeza en confusión. 

El lugar al que se dirigieron fue el punto más popular número uno para las confesiones – la rueda de la fortuna. Los ojos de Mizuha se iluminaron cuando miró a la estructura gigante. 

"Es aún más grande de cerca." 

"Cuando vienes al parque de diversiones, no te puedes perder de este, ¿Verdad?" 

Cada uno hizo sus propios comentarios y tomó su lugar en la fila. Varios malos recuerdos llegaron corriendo de nuevo a la mente de Keiki, principalmente debido a la última vez que vino aquí con un anciano de pelo negro, pero las cosas deberían estar bien esta vez. 

Después de esperar un breve momento, se les permitió entrar a la cabina. Por supuesto, naturalmente terminaron uno frente al otro. Después de comprobar todos los procedimientos de seguridad, el empleado dio luz verde y cerró la puerta. Con nuevos clientes dentro, la rueda de la fortuna comenzó a moverse. 

"Ah, la puesta de sol es hermosa." 

"Sí..." 

Cuanto más arriba iban, más fácil podían ver sobre la ciudad, que estaba coloreada por la puesta de sol. Esta podría ser la situación más romántica posible. Era la oportunidad perfecta para confesarse, pero ahora surgió otro problema. 

Esto no es bueno. Me estoy poniendo muy nervioso de repente... 

Su corazón corría como loco. Cuando lo pensó, esa sería su primera confesión en toda su vida. Estar solo en este espacio aislado con la chica que le interesaba, ya era demasiado para manejar para un principiante enamorado. 

Sin mencionar que Mizuha es demasiado linda... 

Siempre pensó que era linda. Pero últimamente, pensó que se veía aún más hermosa. 

No... Es porque me he dado cuenta de mis propios sentimientos. Por eso creo que se ve tan linda. 

Dicen que el que se enamora primero pierde. Ahora que Keiki se había hecho consciente de estos sentimientos, este amor crecía incondicionalmente, y todo lo que podía pensar era en ella. Su corazón correría sólo por estar junto a ella así, e incluso las palabras 'Te quiero' empezaron a tener un significado diferente al de antes. 

Dicho esto, permanecer en silencio no era una opción. Si no se apuraba, la rueda de la fortuna llegaría al suelo de nuevo. Tratando de calmar sus nervios, miró por la ventana. 

"Oh, son Shouma y Koharu-senpai." 

"Eh, ¿Dónde?" 

"No creo que puedas verlos desde donde estás." 

"Entonces iré allí." 

Mizuha se levantó y se movió junto a Keiki, mirando fuera del cristal. 

"Ah, tienes razón. Se están tomando de la mano." 

Era la tomada de manos de una pareja de una gran diferencia. Sin embargo, Keiki estaba completamente centrado en la cara de Mizuha. De repente, la cabina se tambaleó un poco por el viento. 

"¿¡Kya!?" 

"¡Ah, cuidado...!" 

Mizuha cayó hacia Keiki. Como resultado, atrapó su esbelto cuerpo con su pecho. 

"Lo siento..." 

"No, está bien..." 

En ese momento, se sentía como se había lanzado una magia extraña sobre sus cuerpos. 

"......" 

"......" 

La cabina había alcanzado su punto más alto, y Keiki sostuvo el cuerpo de Mizuha en sus brazos, a una distancia lo suficientemente cerca como para que se besaran. 

"Nii-san..." Mizuha cerró lentamente los ojos. 

Era como si ella le estuviera dando la señal para besarla. Como se mencionó anteriormente, en una situación tan romántica, si intercambiaran un beso, y se confesara, sin duda sería un gran recuerdo para ambos. Sin embargo, con la mayor oportunidad posible frente a Keiki, surgió otro problema. 

"... Lo siento, Mizuha." 

"¿Eh?" 

"Creo que estoy recibiendo mareos por el movimiento..." 

"¿¡Nii-san!?" 

La razón era claramente sus nervios, así como la temblorosa cabina. Una vez que la cabina alcanzó su punto más alto, se sacudió bastante. Debido a esto, la mayor oportunidad para confesarse de Keiki terminó en fracaso. 

Keiki logró evitar vaciar su estómago, pero debido a su condición empeorada, los dos tuvieron que volver a casa justo después de que la cabina llegara al suelo. En este momento, Keiki estaba acostado en el sofá dentro de la sala de estar, con Mizuha dándole una almohada de regazo. 

"Lo siento, soy un inútil Onii-chan..." 

"No se puede evitar. ¿Cómo te sientes?" 

"Lo compensaré, seguro... y por cierto, ¿Por qué me das una almohada de regazo?" 

"Quiero que te recuperes lo más rápido posible, así que pensé que la almohada de regazo de una chica de preparatoria sería el tratamiento más efectivo". 

"Eso suena como algo que un anciano pensaría." 

"Entonces, ¿Cómo se siente?" 

"La sensación de tus muslos es la mejor. Muchas gracias." 

"Fufu, deberías haber sido honesto desde el principio." Mizuha sonrió felizmente mientras acariciaba la cabeza de Keiki. "Esta almohada de regazo es el agradecimiento por ayudarme esta tarde. Mucha gente podría haber casi visto mis bragas después de todo" 

"Me alegro de haberlo hecho el tiempo." 

"Si es Nii-san, no me importa mostrártelas cuando quieras." 

"B-Bien..." 

Keiki no sabía cómo responder. 

"¿Quieres mirar mis bragas ahora? Tal vez te haga sentir mejor". 

"¿Por qué?" 

"Eres un chico, así que pensé que tal vez mirar algunas bragas te daría energía." 

"Quiero decir, me daría energía de una manera diferente." 

"Si lo prefieres, puedo levantar mi falda ahora mismo, y puedes enterrar tu cara en ellas." 

"¡Ese es un reto un poco demasiado alto!" Dijo Keiki, y sin embargo no alejó la cabeza de los muslos de Mizuha. 

Su cabeza se quedó egoístamente como estaba. 

"... ¿Oye, Nii-san? 

"¿Hm?" 

"Gracias por hoy. Me divertí mucho con Shouma-kun y Ootori-senpai". 

"Ya veo..." 

Keiki se alegró de oír eso. 

"Además, hay algo que me gustaría decirte, Nii-san." 

"¿Hah? ¿De dónde salió eso?" 

"Me has estado mimando demasiado recientemente." 

"¿Perdón?" 

"Has sido demasiado amable conmigo en los últimos días. Me salvas de los intentos de cortejo de Mitani-kun, nos tomamos de la mano camino a casa, y ni siquiera te enojas cuando duermo en tu cama". 

"Quiero decir, todavía te digo que dejes de dormir en mi cama..." 

Hay demasiados problemas con una chica de su edad durmiendo en su cama. 

"Incluso hoy, me ayudaste con mi falda..." 

"Eso nos trajo mucha atención" 

"Como hermana menor, estoy feliz de tener un hermano que es tan amable conmigo como Nii-san, y como una brocon, eso lo hace aún mejor." 

"Sí." 

"Pero debes mantenerlo dentro de los límites aceptables." 

"¿Límites aceptables?" 

"Si no, algo terrible sucederá." 

"¿Algo terrible...?" 

"Algo irreversible." 

"¿Qué he empezado...?" 

¿Era un pecado mimar a su hermanita? Si acaso, ser un siscon todavía estaba legalmente permitido. 

"Si no tienes cuidado, y si eres aún más amable conmigo, entonces me enamoraré aún más de ti, Nii-san." 

"Mizuha..." Keiki miró la cara de su hermanita. 

Sus ojos se encontraron, y Mizuha hizo una sonrisa avergonzada. 

Yo había planeado confesarme, y sin embargo ella se me confesó de nuevo. 

La chica por la que Keiki tenía sentimientos era demasiado linda. Su cara comenzó a arder. Era tan adorable que era difícil no abrazarla de inmediato. 

¿Debería confesarme ahora? ... No, se sentiría como si hubiera usado la confesión de Mizuha... 

Keiki vaciló. Confesarse mientras recibía una almohada de regazo sonaba bastante tosco. Mientras contemplaba qué hacer, el teléfono inteligente de Keiki vibró en el escritorio. 

"... ¿Ah, un correo electrónico? 

Levantó su cuerpo y revisó el nuevo mensaje. 

"¿De quién es?" 

"Koharu-senpai. Ella me envió las fotos de hoy.” 

"¡Muéstrame!" Mizuha se acercó el hombro y miró a la pantalla. 

Por un segundo, el corazón de Keiki saltó de un latido, pero logró mantener la calma mientras revisaba las fotos. 

"Ah, tienes ketchup en la nariz en esa, Nii-san." 

"Tienes crepé en la boca en ese, Mizuha." 

"Fufu, los dos somos como niños." 

Mientras revisaban las fotos, hablaban de su día en el parque de diversiones. Usando un solo teléfono, ambos miraron las fotos. 

"........." 

¿Estaba bien que Keiki fuera tan feliz? La chica que amaba estaba justo al lado de él. Tenía su sonrisa para sí mismo, y nadie más lo sabía. 

Ah, ya veo... 

Aunque un poco tarde, finalmente se dio cuenta. 

Me encanta pasar tiempo con Mizuha de esta forma... 

Finalmente entendió de lo que Shouma estaba hablando. Una vez que pasas tiempo con alguien, y disfrutas de este tiempo más que nada, te das cuenta de que te has enamorado. Para Keiki, esta persona resultó ser su hermanita no relacionada por sangre. Su corazón había sido robado por su voz y su sonrisa gentil. 

Quiero hacer todo tipo de cosas con Mizuha... 

Visita todo tipo de lugares, experimenta todo tipo de situaciones, enamórate aún más de ella. Todo lo que harías con un amante, quería experimentar con ella. Los humanos se vuelven codiciosos cuando se enamoran. Keiki había sido muy feliz hasta ahora, y sin embargo, todavía quería aún más. 

"... ¿Oye, Mizuha?" 

"¿Hm?" 

"¿Deberíamos ir a algún lugar de nuevo la próxima semana?" 

"Claro. ¿Con todo el mundo?" 

"No, quiero que seamos sólo nosotros dos." 

"¿Eh? ¿Eso sería..." Mizuha miró a Keiki conmocionada. "una... cita? 

"Sí. Quiero salir contigo, Mizuha." 

"........." 

Cuando Keiki declaró sus sentimientos honestos, Mizuha— 

"Sí, definitivamente." 

Mostró una sonrisa radiante y aceptó la invitación.