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La Identidad del "Gustar"

Pasó el tiempo, y el cielo fue coloreado por la puesta de sol. Naoya llegó a la puerta principal de la escuela, con los pies más pesados de lo habitual. Se apoyó en el casillero y soltó un suspiro.

"Phew... finalmente acabó".

"Buen trabajo. Ha sido un desastre para los dos, huh". Kouno Tatsumi le lanzó este comentario.

Ambos habían obtenido una mala calificación durante la última prueba, y se habían visto obligados a tomar clases suplementarias. Justo cuando Tatsumi quería buscar sus zapatos, inclinó la cabeza, luciendo confundido.

"Nunca esperé que tendrías que tomar lecciones suplementarias, Naoya."

"Siempre fui malo en matemáticas. Deberías saber eso, Tatsumi.

"Pero, no en un nivel en el que obtendrías una calificación deficiente, ¿verdad?"

"... Bueno, sí." Naoya tuvo que aceptarlo.

No quería presumir de ello, pero era bastante capaz cuando se trataba de estudios. No era necesariamente porque tuviera el conocimiento o algo así, simplemente tenía que escuchar al maestro en clase, porque siempre te dicen lo que es parte del examen. En ese sentido, la habilidad de Naoya era un salvavidas.

Por eso, con un poco de auto-estudio antes de un examen, Naoya por lo general no tenía problemas para pasar. Esta fue la primera vez que tuvo que tomar lecciones suplementarias. Tatsumi sabía de esto, y señaló a la cara de Naoya con una sonrisa.

"Estás soñando despierto demasiado, ¿verdad? ¿Hay algo que te preocupe? ¿Debería adivinar?

"Siéntete libre."

"Tiene que ser... Shirogane-san, ¿verdad?

"Bueno, supongo que fue demasiado fácil." Naoya dejó caer sus hombros en derrota.Justo cómo Tatsumi fácilmente había adivinado, la cabeza de Naoya siempre estaba llena de Shirogane Koyuki. Como él mismo sabía lo obvio que era, ni siquiera trató de ocultarlo ni negarlo.

"Quiero decir, nunca realmente te lo dije. El hecho de que la 'Blancanieves venenosa' se está llevando bien con un estudiante masculino aburrido y se ha convertido en un rumor". Tatsumi habló con una voz burlona.

Como fuera, su expresión se volvió seria por un segundo, actuando considerado.

"Quiero decir, la personalidad de Shirogane-san es un poco dura, pero es hermosa, ¿verdad? ¿Qué problema tienes con ser querido por ella?"

"Si acaso, el problema está en mí..."

"¿Huh?"

Naoya dejó salir un suspiro, lo que llevó a Tatsumi a mostrar una reacción desconcertada. Naoya se sentía honrado de que Koyuki pensara en él de esa manera. Más que nada, era feliz. Sin embargo, el problema con eso...

"No sé de qué manera me gusta Shirogane-san..."

"...… ¿Qué?"

Hay muchas maneras diferentes de 'gustar' a alguien. Por ejemplo, podría gustarte alguien como familia, como amigo o en el sentido romántico. El "me gusta" que Koyuki siente hacia Naoya es definitivamente el romántico. Sin embargo, ¿Qué pasa con el propio Naoya? Esta duda lo había plagado durante los últimos días, y aún no ha llegado a una respuesta.

"Eso es lo que está pasando, así que... ¿Qué clase de cara es esa?"

"Eh... Estoy tan sorprendido". Tatsumi miró a Naoya con una expresión pálida, con la voz temblando.

Su actitud curiosa había desaparecido a otro sitio, ya que ahora parecía que estaba observando a un monstruo aterrador en forma de Naoya.

"¿Hablas en serio...? Incluso un niño de kínder podría distinguir eso. Eso no es algo de lo que un chico de secundaria debería preocuparse".

"¡No puedo evitarlo! ¡Nunca sentí algo así!"

"Eso es culpa tuya por no darle una oportunidad a nadie".

"Ugh... No puedo decir nada en contra de eso".

Las palabras de su amigo de la infancia apuñalaron al corazón de Naoya, haciendole volver en si. Como era experto en leer los corazones de otras personas, tenía problemas para construir relaciones. Cada vez que una chica mostraba afecto hacia él, inmediatamente destruía sus esperanzas. Resultando en que fue su falta de experiencia.

¿Eh?, así que... ¿He cavado mi propia tumba...?

La cara de Naoya se puso pálida. En medio de eso, Tatsumi tocó a Naoya en la espalda, mostrando una sonrisa.

"Eres tan bueno leyendo a los demás, y sin embargo no te entiendes a ti mismo en absoluto. Realmente me siento mal por ti".

"Piensa en cómo me siento... ¿Eres un demonio o algo así?"

"Quiero decir, tengo una novia, así que tengo el derecho."

"Derecho..."

Puede parecer frívolo, pero Tatsumi tiene una novia con la que ha estado saliendo por más de un año. Desde su perspectiva, las preocupaciones de Naoya probablemente sonaban como una broma.

"Aún así... cómo shirogane-san podría encontrar interés en un bicho raro como tú... ¿Oh?" Tatsumi se encogió de hombros con incredulidad, y caminó adelante después después de haberse cambiado los zapatos al aire libre.

Sin embargo, justo al salir de la entrada, detuvo sus pies.

"Bueno, realmente no sé cómo sucedió, pero... Parece que ella es muy seria al respecto.

"¿Huh? ¿De qué estás hablando?"

"Quiero decir, ¿no es esa Shirogane-san por ahí?"

"¿¡Huh...!?"

Tatsumi apuntaba a la puerta principal. Los clubes todavía estaban en plena práctica, ya que un gran número de estudiantes caminaban por la zona. En medio de esto, apoyada en el pilar de la puerta, estaba Koyuki.

"Shirogane-san!?"

"Ah..."

Naoya gritó en el calor del momento, corriendo hacia ella. Koyuki vio esto, y su rostro se iluminó. Sin embargo, eso sólo duró un segundo, ya que corrió sus dedos a través de su cabello, creando su sonrisa fría habitual.

"Vaya, pero si es Sasahara-kun. Qué coincidencia."

"Coincidencia... Estabas esperando aquí, ¿verdad?"

Un ligero destello de agotamiento se podía ver en la cara de Koyuki. Hay rastros profundos de sus pies sobre el suelo también... Tenía que haber estado esperando por mucho tiempo, sin duda.

"Te dije que te fueras a casa sin mí porque tenía clases complementarias de matemáticas..."

"Hmpf, no seas tan engreído. No te estaba esperando para nada. Estaba estudiando en la biblioteca". Dijo Koyuki con un tono frío, pero Naoya sabía que estaba actuando ruda.

Sin embargo, en lugar de señalarlo, Naoya bajó la cabeza hacia Koyuki.

"Ya veo. Pero, siento haber tardado tanto. Me aseguraré de no recibir más lecciones suplementarias de ahora en adelante".

"Ugh... Bueno, si ves la necesidad de disculparte, entonces la aceptaré, sí." Koyuki evitó ligeramente su mirada, y respondió con palabras inseguras.

La punta de su nariz estaba roja, por lo que claramente parecía satisfecha. Naoya no pudo evitar pensar que Koyuki era tan linda una vez más.

Como pensé, estar con ella es muy divertido...

Al leer el corazón de otra persona, se cansaba. Siendo así, se sintió diferente cuando estaba con Koyuki. En lugar de estar cansado, le hizo sentirse en paz.

Pero... Aún no puedo decir si esto es amor o no...

Después de todo, Naoya tenía otras personas a su alrededor que actuaban de manera similar a Koyuki. Sus padres, el gerente de la tienda, y

"Oh, es Naoya".

"Oh?"

"Mm..."

Allí, Naoya escuchó una voz alegre a sus espaldas. Al dar la vuelta, vio a una sola chica. Poseía el cabello rojo, atado con una cola de caballo, y piernas delgadas que bajaban de su falda. Sus ojos en forma de almendra le dieron una atmósfera animada. De hecho, era una chica muy deportiva.

"Yui, eh. ¿En tu camino a casa desde el club?

"No, no teníamos club hoy. ¿Qué hay de ti, es raro que estés fuera a esta —¡Espera, Shirogane-san!?"

Le tomó un segundo notar la presencia de Koyuki, pero eventualmente dejó salir un grito. Sus ojos se abrieron de par en par, mientras observaba de cerca a ambos.

“¿Por qué están ustedes dos juntos? ¿Cuál es tu conexión?"

¿Nunca te lo he dicho? Ha sucedido mucho, y últimamente nos hemos estado conociendo el uno al otro".

“Ehhhhhh... Por qué se llevaría ella bien con un rarito como tú... Ah, Shirogane-san, ¿Estás de camino a casa también?”

“S-Sí…” Koyuki asintió cobardemente.

Parecía haber algún tipo de muro entre ellas, pero no actuaban exactamente como extrañas. Naoya pensó en esto como algo extraño, cuando se juntó las manos.

“Oh, es cierto, Yui también está en la clase 3. Igual que Shirogane-san, ¿verdad?"

“Sí, sí. Sin embargo, rara vez hablamos la una con la otra".

“…Sí”. Koyuki asintió de nuevo, y miró a Naoya.

La sonrisa que ella mostró fue claramente forzada. Al mismo tiempo, el sintió una sensación como agujas que le apuñalaban al cuerpo.

“Por cierto...¿Son tu y Natsume-san amigos, Sasahara-kun?”

“Amigos, sí. Si tuviera que definirlo, somos amigos de la infancia.”

“Sip. ¡Hemos estado juntos desde el jardín de infantes! Una de esas conexiones podridas como la llaman.” Yui respondió luego de Naoya.

Natsume Yui, una amiga de la infancia de Naoya durante los últimos 10 años, si no es que más. Como vivían cerca el uno del otro, sus familias a menudo se ponían en contacto, y Naoya a menudo cenaba con la familia Natsume. Era una de las pocas personas con las que Naoya se llevaba bien.

“Oh... con que es así…” Koyuki aceptó esta explicación con una expresión seria.

Naoya sintió que el aire que lo rodeaba se enfriaba. Se dio cuenta de inmediato por qué esto sucedió.

"Ah, está bien, Shirogane-san". Naoya apuntó a Yui, y explicó. “Yui es solo una amiga de la infancia, no tienes que preocuparte de na—”

“!H-Hey!”

“¿¡Mguh…!?”

Allí , Koyuki cubrió la boca de Naoya con sus manos. Con esta reacción inesperada, Naoya estaba confundido.

Eh, ¿qué? Pensé que estaba proporcionando un buen seguimiento, ¿no es así?

Era dolorosamente obvio que Koyuki sentía celos hacia Yui. Por eso Naoya quería aclarar esta ansiedad, pero... Seguramente no esperaba esta reacción. Naoya solo comprendia los sentimientos de la gente, y sin embargo, no podía encontrar la razón tras la acción de Koyuki en lo más mínimo. Estaba desconcertado cuando Koyuki le habló con una voz tranquila.

"Ten un poco de delicadeza! Probablemente no lo sepas, pero cabe la posibilidad de que Natsume-san tenga sentimientos por ti... ¡La vas a lastimar!"

"¿Gustarle a Yui?  No, eso no es posible".

"¿Y por qué crees es eso? ¡Siempre hay una posibilidad! ¡Ella es tu amiga de la infancia, sabes!"

Su argumentación estaba bastante fuera de lugar, pero Koyuki parecía seria al respecto. Finalmente, Naoya comprendió la razón de su repentino arrebato. Para su sorpresa... Era la forma de Koyuki de ser considerada.

Ehhhh... Ella está enojada por Yui, a quien considera una rival en el amor... ¿Qué tan adorable puede ser?

Dejando a un lado la pregunta de si esto era afecto romántico o no, a Naoya le comenzó a gustar a la chica cada vez más.

"Oye, ¿estás escuchando?" Koyuki exclamó, ya que Naoya no daba respuesta.

En medio de eso, Yui mostró una expresión verdaderamente intrigada. Como estaban a sólo dos metros de distancia, ella podía notar cualquier cosa que Koyuki dijera.

"Um, siento interrumpirte así, pero..."

"¿Por qué están todos tan empalagosos?" Allí, Tatsumi habló, que había estado al margen, observando.

Yui levantó una mano.

“Ah, Tatsumi. Buen trabajo hoy. ¿Estabas junto con Naoya?"

“Sí, hemos recibido lecciones complementarias juntas”.

“Hahaha, eso es inesperado.”

"U-Um... Sasahara-kun, ¿Quién es el?" Con la aparición de otra persona, Koyuki preguntó tímidamente.

Debería haberlo visto junto con Naoya varias veces, pero aparentemente no lo recuerda. Naoya siguió adelante y lo presentó.

“Es un compañero mío, Kouno Tatsumi”.

“¡Y es mi amigo de la infancia, además que mi novio!”

"Es un gusto conocerte, Shirogane-san".

"¿Ah, es un gus... espera, novio?"

El vocabulario que salió de la boca de Yui dejó a Koyuki en shock.

"Sí, así es. Así, ¿ves?" Dijo Yui, cruzando los brazos con Tatsumi.

Ella lo hizo normalmente, sin mostrar vergüenza alguna, mostrando una señal en V con sus dedos.

"¡Somos una pareja adorable!"

"Okey..."

"¿No lo entiendes? Pareces descolocada Shirogane-san."

"Ehh, siempre estamos así, ¿No es así?"

"Técnicamente lo somos, pero considera la situación". Tatsumi replicó, pero no le quitó el brazo.

En su lugar, parecían una pareja que se podía encontrar por todas partes. Koyuki observó esto con asombro, así que Naoya dio una explicación.

"Todos somos amigos de la infancia, y estos dos están saliendo. Yo soy el mal tercio."

"H-Hmm... así que así es... Huh. Koyuki miró a los dos, y agachó la cabeza varias veces.

Naoya mostró una sonrisa irónica.

"... ¿Eso arregló tu estado de ánimo?"

"¿Huuuh? ¿Qué dices? No me importa en absoluto qué tipo de relación tengas con otras chicas. ¿Puedes dejar de ser tan engreído?" Koyuki mostró una reacción fría.

Habiendo dicho eso, la atmósfera tensa de antes había desaparecido, como su habitual sentido de la distancia regresó. Aparentemente, el malentendido había sido resuelto. Naoya suspiró aliviado, pero...

"... Y, ¿Qué están haciendo estos dos?"

Las dos personas que Naoya apenas había introducido se situaron de repente a bastante distancia de ellos. Se escondieron en las sombras de una máquina expendedora, susurrándose el uno al otro.

"Estos dos... ya sabes..."

"Pero... esto no es como si ellos..."

"Entonces, eso significaría..."

"Oh, eso suena bien. ¿Deberíamos hacer eso?"

"¡Claro que sí!"

Naoya no podía entender su conversación por completo. La audición de Naoya estaba bastante desarrollada, así que estos dos amigos de la infancia, que lo sabían, se trasladaron a una distancia donde ni siquiera él podría oír.

¿De qué están hablando...?

Naoya estaba curioso, y los miró fijamente. Al mismo tiempo, Koyuki actuaba tranquila, pero murmuraba algo para sí misma.

"Quiero decir, no es como si me preocupara por ellos... Natsume-san me hace sentir un poco intrigada, tener un novio a pesar de que tiene la misma edad que yo. Me encantaría saber cómo terminaron juntos..."

Al parecer, no se ha dado cuenta de que Yui y Tatsumi traman algo. Finalmente, estos dos regresaron, sonriendo de oreja a oreja, e ignoraron completamente la mirada de Naoya. Al instante, Yui se dirigió directamente hacia Koyuki.

"Oye, oye, Shirogane-san. ¿Tienes más tiempo hoy?"

"Eh? Sí... pero, ¿por qué?

"¡Perfecto! La cosa es... tada! Yui sacó un billete colorido de su bolso.

La agitó delante de Koyuki.

"Este es un cupón para una tienda de crepas frente a la estación de tren. Es para cuatro personas, así que ¿Por qué no vienen tú y Naoya con nosotros?"

"¿¡Eh!?" Los ojos de Koyuki se abrieron de par en par, así que tragó su aliento.

Ella se quedó congelada por un breve segundo, y devolvió una pregunta.

"B-Básicamente... ¿me estás invitando...?"

"Sip. Si no te apetece, está totalmente bien. ¡Sólo piensa en ello un poco!"

"U-Um... bien..." Koyuki comenzó a inquietarse ante el incesante aproximación de Yui.

Naoya vio esto, francamente intrigado.

No me digas... ¿Shirogane-san está realmente interesada?

Yui es igual que Tatsumi, una amiga a largo plazo de Naoya. Ella sabe cómo Naoya mantenía su distancia de las chicas, y tiene sentido para ella estar interesada en la relación entre Naoya y una belleza como Koyuki. Las chicas adoran las charlas de amor, y ella es definitivamente una que lo hace. Sin embargo, Naoya estaba aún más interesado en Koyuki.

"¿Alguna vez fuiste allí? ¡Usan algunos ingredientes raros! ¡Estoy seguro de que le gustará!

"Ah, um..." Koyuki se estaba sonrojando furiosamente.

Estaba más que claro que estaba tensa.

A este ritmo, volverá se volverá la 'Blancanieves venenosa' de nuevo...

El recuerdo del otro día aún estaba fresco. Por eso, Naoya planeó darle una mano amiga...

"Hey, hablemos de cosas de amor mientras comemos un poco de crepa juntos".

"¿Cosas de a-amor...?" Las cejas de Koyuki se estremecieron.

Repitió esta palabra varias veces, y—Agarró la mano de Yui, con el boleto dentro de ella.

"¡Iré! ¡Por favor, cuéntame mucho sobre el amor!"

"¡Oh, eso es lo que me encanta oír!"

"A las chicas les encantan ese tipo de cosas, eh..."

"¿Puedes parar con la broma de esa mala palabra?... Pero sí, me pregunto lo que es tan genial acerca de ello?

Los dos chicos vieron a las chicas emocionarse y sacudieron sus cabezas.

La tienda de crepas siempre era popular y estaba llena de estudiantes, pero debido a que había pasado algún tiempo desde que las clases llegaron a su fin, sólo tres o cuatro personas estaban esperando frente a la tienda. Yui observó el menú, y asintió para sí misma con una expresión seria.

"Me pregunto qué debería pedir... Pedí la crepa de fresa antes, así que tal vez debería pedir chocolate hoy. Tatsumi, ¿Qué te parece?"

"Soy malo con cosas dulces... ¿Tienen algo más que eso?"

"Tienen Salchicha de Fráncfort o ensalada de atún, creo... ¡Ah, el empleado dijo que tienen natto y rábano daikon encurtido! ¿Quieres aceptar el reto?"

"Ni en un millón de años. ¡Dame el arroz blanco!"

La pareja amigos de la infancia estaban coqueteando como siempre cuando pedían sus órdenes. Naoya aprovechó esta oportunidad para hablar con Koyuki.

"Lamento que te hayas visto obligada a acompañarlos, Shirogane-san. No te estás forzando, ¿verdad?"

"No del todo. Tenía tiempo, así que vine contigo." Se encogió de hombros y entrecerró los ojos. "Es sólo... que esta es mi primera vez siendo invitada después de la escuela así, así que... Yo puede que esté un poco nerviosa.

"Oh, sí, dijiste que no tenías amigos".

"Ugh... ¿Podrías no decirlo así? No puedo negarlo, sin embargo. Koyuki miró a Naoya, suspiró.

Y, miró torpemente a la tienda de crepas.

"Tomar un desvío en mi camino a casa es una cosa, pero nunca fui a una tienda de crepas como esta... Hablando de amor, nunca he hecho eso tampoco… ¿V-Voy a estar bien? Estoy un poco preocupada".

"No es tan importante. Sin mencionar que ni siquiera llegamos a la parte de pedido todavía.

Aún así, Koyuki parecía rígida, así que Naoya no podía evitar preocuparse.

Es muy honesta hoy...

Hacia Naoya, ella actuaba igual que siempre, pero cuando se trataba de Yui y Tatsumi, ni siquiera sacaba su lengua venenosa. Parecía que se esforzaba por mantenerse bajo control.

Supongo que la crepa y la charla de amor realmente la ganaron... O tal vez—¡Ah!

Naoya pensó hasta ahora, y llegó a una posibilidad. Tragó saliva, y preguntó cuidadosamente.

"No me digas... ¿Es porque te dije que me gustaría que fueras más honesta?"

"Hmpf, que autoconsciente tan excesivo." Koyuki mostró un bufido arrogante. "No hay manera de que tus palabras puedan influir en mis acciones, Sasahara-kun. Realmente eres demasiado engreído para tu propio bien. No veo ningún valor en ninguna conversación contigo. Si acaso, inmediatamente los olvido al día siguiente. Pero... ¿tal vez un poco? Koyuki escupió su veneno habitual en Naoya, y se despejó la garganta.

Su mirada cayó sobre sus dedos, y continuó.

"Quería hacer algo como esto. No estoy muy interesada en hablar de amor, pero no odio las cosas dulces, así que..." Murmuró débiles excusas.

Con las mejillas enrojecidas, miró a Naoya.

"Por eso, pensé... que me alegra de haber obtenido el valor. No es gracias a ti de ninguna manera, pero... Aún así quiero decirlo, así que... gracias."

“………”

"Eh, ¿Qué? ¿Por qué no dices nada? ¿D-Dije algo extraño?"

“No, um…” Naoya tuvo que cubrirse la boca ante el pánico de Koyuki. "Es solo que... el poder destructivo es demasiado grande, casi sentía que mi alma saltaba de mi cuerpo. No me prestes atención".

“Quiero decir, eso me da aún más curiosidad... ¿Qué quieres decir con poder destructivo de todos modos?” con una expresión confusa Koyuki entrecerró los ojos.

Sólo ese gesto era más encantador de lo que creía, dañando enormemente el corazón de Naoya.

No puedo... En serio, ¿Quién no se enamoraría de ella?

Todavía no podía descubrir la identidad de sus sentimientos hacia Koyuki. Sin embargo, su afecto hacia ella siguió subiendo y subiendo. Al ver su trabajo tan duro para cambiarse a sí misma, hizo que Naoya quisiera alabarla, acariciarla en la cabeza.

¿Hm? Así que básicamente... ¿Soy algo así como su guardián?

Después de todas esas preocupaciones, apareció otra posibilidad. ¿Le gustaba como una amiga, como una chica, o porque era su guardián?

¿Qué clase de "me gusta" siento hacia ella?

En consecuencia de esto, sin hablar hasta el momento en que ordenaron, incluso mientras se sentaba en la mesa con los otros tres, Naoya continuó pensando en ello. Mientras él guardaba silencio, las chicas se emocionaban por su charla de amor.

"¿¡Eh...!? ¿La razón por la que ustedes dos empezaron a salir es por Sasahara-kun? Realmente no puedo verlo como una especie de cupido sin embargo..."

"Bueno, él lo forzó."

"¿Cómo puede un cupido forzar el amor?"

"Es una larga historia, pero..." Yui miró a Naoya, y se encogió de hombros. "Para mantenerlo corto, los tres fuimos a casa un día cerca de nuestra graduación de la escuela media, y Naoya de repente dijo: 'Así que díganme, ¿Cuándo van a empezar a salir?', sabes".

"S-Sin delicadeza en lo absoluto..."

"¿Verdad? No quiero volver a pasar por eso..." Tatsumi murmuró, mientras tomaba un bocado de su crepa.

Los tres miraron a Naoya, lo cuál el no podía ignorar por más tiempo.

"N-No no no, yo tenía mi propia razón." Dio un bocado a su propio crepe, y comenzó a explicar.

Esos tres han estado juntos desde el jardín de infantes. Incluso sin la excesiva habilidad de lectura de Naoya, estaba claro que Yui y Tatsumi tenían sentimientos el uno por el otro, y sin embargo no pasaba nada. Por suerte, habían decidido asistir a la misma escuela secundaria, pero ambos tenían muchos amigos.

Una vez que terminaran la escuela secundaria, seguramente empezarían a vivir separados, así que Naoya pensó que esta debía ser su última oportunidad.

Por eso les empujó la espalda. A la fuerza, claro esta. Las cosas eran incómodas al principio, pero después de que pasara un poco de tiempo, terminaron tan cercanos como estaban ahora.

"Es una historia conmovedora, ¿no estás de acuerdo?" preguntó Naoya.

"No sé nada sobre eso... No suena como la dulce y agria charla de amor que esperaba..." Koyuki se quejó mientras comía su crepa de fresa.

Como claramente no sabía cómo comerlo, con cada bocado, un poco de crema terminaba en la punta de su nariz. Ella lo limpiaba con un pañuelo, y el proceso se repetía. Ver esta acción le recordó a Naoya a un animal pequeño, lo cual elevó aún más su afecto.

"Basta de nosotros". Dijo Yui. "Quiero saber más sobre ti, Shirogane-san."

"¿Eh? ¿A-Acerca de mí...?"

"¡Charla de amor! ¿Qué te gusta de Naoya?"

"¿¡Fueh!?" Ella agarró firmemente la crepa por el shock, haciendo crujir el papel.

Su cara era aún más roja que una fresa, ya que su boca se abría y se cerraba en confusión y conmoción. Sin embargo, rápidamente se hizo con el control de sí misma, y mostró una sonrisa arrogante —para ocultar el sudor que venía de cada poro de su cuerpo— y habló.

"Qué broma tan interesante. No hay manera de que yo tendría sentimientos por un bicho raro como él. Señaló a Naoya con la barbilla, y continuó con una atmósfera fresca. "Ahora mismo... Estamos teniendo un juego para que se enamore de mí. Eventualmente se me confesará. Pero, no tengo ningún sentimiento especial por él.

"Ahh, ya veo. Me preguntaba si ese podría haber sido el caso"

"Así es, ¿verdad... Eh? Los ojos de Koyuki se abrieron de par en par.

A Yui sin embargo no le molestó esa reacción, y señaló a Naoya.

"Quiero decir, ese tipo no tiene ningún tipo de delicadeza. No puede ocultar nada, su aspecto es normal en el mejor de los casos, y no parece un buen partido para una belleza como tú de todos modos"

"Oye, ¿puedes dejar de insultarme tan suavemente durante la conversación?" Naoya se quejó.

"Puede ser un poco insensible a veces... ¿Supongo?

"Eh, ¿Shirogane-san...?" Naoya se sintió herido.

Koyuki sin embargo ignoró su reacción dolorida, y continuó.

"Pero... Sasahara-kun no es una mala persona. Me salvó muchas veces, y estar con él me tranquiliza... Por eso, um..." Koyuki murmuró estas palabras mientras miraba repetidamente la cara de Naoya. "Es muy amable... así que no creo... que seamos un mal un partido."

Fue un ataque tan emotivo y lindo en Naoya. Que sin esperar esta respuesta, incluso Yui y Tatsumi miraban a Koyuki. Naturalmente, Naoya también, recibiendo un shock aún mayor que el de esos dos juntos. Un largo silencio siguió, sólo roto por el grito de Koyuki.

"P-Pero, pero, ¡No me gusta ni nada! ¡En absoluto, está bien!"

"¿Eh? Ah, sí, sí lo entiendo. Siento preguntar algo raro como eso, Shirogane-san."

"Hmpf, siempre y cuando lo entiendas." Koyuki mordió su crepa.

Aún así, estaba ocultando claramente su vergüenza. Al darse cuenta de esto, Naoya se quedó en silencio.

Puede que no sea capaz de ser honesta, pero es consciente de sus propios sentimientos... Comparado con eso, yo sólo estoy...

Naoya sentía arrepentimiento hacia Koyuki.

"Ya veo. Lo entiendo perfectamente. ¿Verdad, Tatsumi?"

"Sip"

Yui y Tatsumi intercambiaron una sonrisa agradecida, claramente estando de acuerdo en algo, pero Naoya estaba demasiado perdido en sus pensamientos como para captar eso. Mientras mordía su crepa, Yui le llamó.

"Por cierto, tu crepa se ve realmente deliciosa, Naoya."

"¿Huh...? ¿En serio?"

Naoya estaba comiendo helado de té verde y crepa de frijol azuki. Comparado con el de Yui, casi no era tan dulce, así que ella podría haber querido una probada. Como él esperaba, ella puso juntas sus manos.

"Oye, oye, ¿puedo probarlo?"

"¿Huh? Claro que no. Tu boca es demasiado grande, te lo vas a comer todo".

"Vamos, no lo voy a hacer".

"Lo harás totalmente. Toma un poco del de Tatsumi entonces.

"Ehh, no me gusta el natto sin embargo."

"Ahora que lo mencionas, ¿por qué pediste algo así, Tatsumi?"

"Esto es realmente genial". dijo Tatsumi, con las mejillas llenas de crepa de natto.

Yui le dio una mirada en blanco, sólo para moverse hacia Naoya.

"Es sólo un bocado. ¡Vamos!"

"Jesús... Muy bien, aquí."

"¡Gracias!" Yui ni siquiera dudó en comer algo.

Ninguno de ellos se molestó en pensar en un beso indirecto en este punto. En cambio, Naoya sólo miró hacia abajo en la pequeña cantidad de crepa que quedaba en su mano, y soltó un suspiro.

"E-Entonces... ¡Dame un bocado, también!

"¿¡Eh!?" Naoya se sorprendió al escuchar estas palabras de Koyuki.

Examinando, Koyuki miró a Naoya con una expresión seria. En lugar de simplemente querer probar el sabor de la crepa, probablemente estaba celosa de Yui y su repentino acercamiento hacia Naoya. Como Naoya no tenía razón para rechazarla, pensó que al menos podría terminar con esto. Sin embargo...

Eh, ¿Qué es esto?... Me siento raro de repente...

Naoya notó que sus propios latidos del corazón comenzaron a acelerarse, y su rostro se sentía más caliente de lo habitual. Una avalancha de torpeza lo agredió, mientras incluso tartamudeaba.

"S-Seguro... Toma."

"G-Gracias... Ñom."

Naoya ofreció su crepa a Koyuki con un movimiento rígido, quien se acercó su rostro hacia él. Ella puso su cabello sobre su oreja, y mordió una pequeña porción en la esquina de la crepa... Naoya vio esto mientras se olvidaba de respirar.

"Sí, delicioso." Ella cuidadosamente masticó la crepa, y movió su cuerpo hacia atrás.

Se podía ver sus pequeños labios moviéndose durante ese proceso.

"¡Ugh...!"

"Eh, ¿qué? ¿Qué ha pasado? ¿Comí demasiado...?"

Naoya sostuvo su mano sobre su pecho, lo que dejó a Koyuki preocupada. Como resultado, algo raro estaba pasando con el corazón de Naoya. Nunca había experimentado algo así.

¿Qué ocurre?... ¿Por qué sólo es diferente con Shirogane-san... ¡Mí corazón...!

Naoya no sabía qué tipo de significado tenía esto. Su cerebro estaba a plena capacidad, ni siquiera podía pensar en ello si quería. Tatsumi vio el sufrimiento Naoya, y mostró una sonrisa brillante.

"Realmente eres un tipo afortunado, siendo capaz de coquetear con una chica tan linda. Si no fuera por Yui, podría haber ido a por ella.

"Voy a fingir que no escuché eso, Tatsumi. Pero, tengo que estar de acuerdo en que Shirogane-san es una lindura. ¡Su piel se ve tan suave!"

"¿Verdad? Tiene un gran estilo, y es buena estudiando. Es como si ella fuera una flor inalcanzable".

"¿¡Eh!? E-Eso no es..."

Se encontró con estos repentinos elogios, Koyuki se sonrojó furiosamente, lanzando su cara hacia abajo. Como siempre fue tratada como la "Blancanieves Venenosa", probablemente no estaba acostumbrada a recibir elogios de esta manera. Ni siquiera tenía tiempo para tirar su lengua venenosa y se quedó callada. Naoya estuvo de acuerdo con las palabras de Tatsumi... y sin embargo, se sentía acomplejado al respecto.

¿Eh? Dejando a un lado a Yui, ¿No está Tatsumi demasiado cerca?

Naoya se sentía feliz de que alguien entendiera los buenos lados de Koyuki. Sin embargo, algo lo atormentaba cada vez que Tatsumi hablaba con ella. El latido de su corazón se había calmado, ya que ahora la irritación reinaba dentro de su pecho. Naoya miró a Tatsumi, que aparentemente se dio cuenta de eso. Sin embargo, lo ignoró completamente, y alzó una voz alegre.

"Shirogane-san, eres la mejor del año estudiantil, ¿verdad? ¿Podrías ayudarme con mis estudios alguna vez?

"¿Eh?"

"¿Huuuuuh...?" Naoya aullaba con una voz lo suficientemente profunda como para sorprenderse a sí mismo.

Los ojos de Koyuki estaban bien abiertos, como si no lo hubiera esperado. Tatsumi, sin embargo, continuó sin reparos.

"Quiero decir, obtuve una mala calificación durante mi último examen de matemáticas. Quería tomármelo más en serio. Si me enseñaras, seguramente obtendría buenas calificaciones".

"B-Bueno... Soy bastante buena en matemáticas".

"Entonces, ¿puedo pedirte eso, Shirogane-san? Si pudieras enseñarme, no me importaría compensarte con alguna crepa en otro momento".

"Eh, pero..."

"Ah, ¿quieres algo más aparte de una crepa? Sólo pídeme cualquier cosa, voy a hacer todo lo posible para darte un regalo. Tatsumi sonrió, se acercó implacablemente a Koyuki.

Sonaba como si la estuviera presionando. Curiosamente, Yui continuó comiendo su crepa. La propia Koyuki estaba pérdida sobre en qué decir, cuando Tatsumi junto sus manos.

"Es por eso que, si estas libre, podríamos—"

"No". Naoya cortó entre los dos.

Ignoró la reacción de Koyuki y miró a Tatsumi.

"No se puede hacer. No te acerques demasiado a Shirogane-san"

"¿... Oh? Las esquinas de la boca de Tatsumi se levantaron hasta formar una sonrisa.

Como si su actitud de antes hubiera sido una mentira, sólo sonrió a sí mismo. Koyuki inclinó la cabeza en confusión.

"¿De dónde vino eso, Sasahara-kun. ¿Por qué estás tan enojado?"

"¿Eh ? Quiero decir, no estoy enojado ni nada..."

Habiendo dicho eso, Naoya se dio cuenta por primera vez de que estaba actuando. Inclinó la cabeza en confusión, comiendo el último poco de crepé que había dejado.

"Me he sentido raro por un tiempo..."

"¿Raro? ¿De qué manera?" preguntó Koyuki.

"Quiero decir... No sentí nada cuando Yui comió un poco de mi crepa, pero cuando lo hice contigo, Shirogane-san, mi corazón comenzó a correr".

"¿Eh?"

"Cuando Tatsumi actuó demasiado amable contigo, me sentía irritado también... ¿Qué es esto, me pregunto?"

"¿Es posiblemente..." Koyuki tragó audiblemente, y echó un vistazo más de cerca a Naoya. "...Un resfriado? Eso explicaría por qué te sientes extraño".

"Sí, tal vez... Debería tomar mi temperatura una vez que llegue a casa".

"¿Por qué terminaría así?" Tatsumi replicó.

Su puño temblaba de ira, mientras sostenía su cabeza.

"¿Este tipo va en serio? Después de todo lo que he configurado, ¿todavía no lo entiende?"

"No se puede evitar, Tatsumi. Naoya realmente no entiende nada de sí mismo.

"¿Huh? ¿De qué están hablando?"

Yui había tocado a Tatsumi en el hombro como para animarlo. Naoya observó sus reacciones, pero no pudo entender nada. En respuesta a eso, Yui mostró una sonrisa irónica.

"No te importan otras chicas, pero te pones protector cuando se trata de Shirogane-san, ¿verdad? Sólo puede haber una razón para eso, ¿no crees?

"¿Razón? Así que hay algo más además de un resfri—Ah." Naoya finalmente se dio cuenta.

Entendió la razón por la que los dos habían estado actuando y por qué se había sentido así.

"No me digas... ¿Es esta la respuesta?"

"Probablemente, sí"

"Lo notas tarde, idiota".

"¿De qué están hablando...?"

Solamente Koyuki estaba sentada en medio de los cuatro, perdida más allá de ayudar. Naoya se volvió hacia ella, y habló con una expresión seria.

"Shirogane-san, estos no son síntomas de un resfriado".

"Entonces, ¿Qué más puede ser?"

"Estos son los síntomas... del amor."

"Oh, en serio... Espera, ¡¿qué?!" Koyuki casi lo deja caer, pero finalmente se dio cuenta de ello al final.

Sin embargo, Naoya ignoró por completo ese estallido, y en su lugar tomó su mano. Desde las puntas de sus dedos, sintió cómo todo el cuerpo de Koyuki se tornaba caliente. La chica parecía cercana a colapsar.

"Para ser honesto contigo, tuve muchos problemas para pensarlo. Sé que me gustas, Shirogane-san, pero no sabía qué clase de "Me gusta" era esto... Sin embargo, finalmente lo entiendo ahora".

Tomando todas las pruebas que había reunido, comprendió sus propios sentimientos.

"¡Me gustas en el sentido romántico, Shirogane-san! ¡Sin dudarlo!"

"¿Qué estás soltando como si no fuera nada?". El grito de Koyuki rugió a través de la tranquila tienda.

Gracias a eso, los demás clientes y empleados dirigieron su atención hacia ella. Hasta Tatsumi le dio a Naoya una mirada fría.

"Realmente sólo tienes 0 o 100, eh."

"Bueno, el amor te hace ciego, como dicen." Yui sonrió y lanzó un comentario propio de ella, pero Naoya no podía ser molestado por eso.

Había algo más importante de qué hablar.

"Shirogane-san, dijiste que me harías enamorarme de ti, ¿verdad?"

"Eh? Yo-yo dije que... ¿qué hay con eso?

"Y... dijiste que harías que me confesara.

"...… No me digas!

"Exactamente". Naoya asintió.

A fin de conceder su deseo, Naoya quería abrir la boca, pero...

"¡Shirogane-san! Por favor, sal con—¡Espera, Shirogane-san!?"

"Esto es un poco demasiado repentino para mí... ¡Kya!

Antes de que Naoya pudiera terminar con sus palabras, Koyuki huyó, sólo para caer de cara a pocos metros.

"Ugh... Te dije que podía caminar por mi cuenta."

"No, esto sucedió por mi culpa".

Mientras el sol iluminaba el distrito residencial, Naoya caminaba con cuidado, con Koyuki en su espalda. Volvieron a la escuela, le mostraron la lesión a la enfermera de la escuela, quien les dijo que Koyuki se había torcido el tobillo. Ya que tuvo que tomar un descanso por un día, esta es la solución que se les ocurrió.

Koyuki se resistió fuertemente al principio, pero finalmente se rindió ya que habían llegado a mitad de camino. Sus brazos alrededor del cuello de Naoya eran vacilantes, pero al menos no se desenfrenó. Por cierto, Tatsumi y Yui siguieron su propio camino después de terminar su comida en la tienda de crepas. Ambos estaban preocupados por Koyuki, pero se lo dejaron a Naoya.

"Tienes que pensar en el ritmo de Shirogane-san, ¿de acuerdo?"

"... Muy bien."

Yui le dio a Naoya una advertencia final como esa, que todavía permanecía en su cerebro. Después de caminar un rato, Naoya sintió la necesidad de disculparse de nuevo.

"Um... Perdón por lo de antes. Me adelanté por mí mismo".

"Claro que sí. No puedo ir a esa tienda nunca más. Koyuki habló con un tono de enfado.

Naoya podía sentir su inquietud, mientras continuaba.

"Pero... ¿Es cierto lo que acabas de decir hace un rato?

"Sí. Realmente me gustas en el sentido romántico, Shirogane-san.

"Ugh... ¿C-Cómo puedes decir algo así tan fácilmente..." murmuró Koyuki.

Desde que quedó pegada a su espalda, pudo sentir su corazón acelerándose. Gracias a eso, el propio Naoya encontró su corazón latiendo mucho más rápido de lo habitual.

"Pero... ¿Es eso realmente cierto?"

"¿Eh?"

"Quiero decir, ni siquiera nos conocemos de tanto tiempo. ¿Qué pasa si es un malentendido, o simplemente una broma... ¿sabes? Su voz temblaba, cómo si estuviese a punto de desaparecer.

Naoya no podía comprender su expresión, pero sentía que podía adivinar.

"Es por eso que... Quiero creerlo... Pero no puedo. Lo siento."

"... Ya veo. dijo Naoya con un tono ligero.

Con toda honestidad, fue un gran shock para él, pero lo que Koyuki dijo tenía sentido.

Sí... Confesar esto tan rápido, tendría sentido que ella este preocupada...

Koyuki siempre fue cuidadosa con otras personas. Si Naoya se le acercara de repente así, seguramente levantaría la guardia. Era como interactuar con un gato callejero. Probablemente su confianza hacia él volvió a cero. Por eso Naoya respondió con calma.

"Por supuesto, realmente me gustas. Por eso... Haré todo lo posible para mostrártelo de aquí en adelante. Para que me creas."

"... Hmpf, adelante e inténtalo."

Quería creerlo, pero no pudo. Esas palabras definitivamente fueron sus verdaderos sentimientos, y un conflicto para la propia Koyuki.

Sí, no hay necesidad de apresurarse. Finalmente descubrí mis propios sentimientos, así que me tomaré mi tiempo para mostrárselos.

La primera etapa había sido completada. Aquí es donde comenzó la verdadera batalla. Naoya se rió, y continuó con un tono bromista.

"Pero, un día, cuando sienta que te lo pueda hacer entender, voy a confesarme de nuevo. Por eso, ¿Podrías pensar en tu respuesta hasta entonces?"

"Ugh... T-Tan asertivo... Además, ¿Qué harías si te rechazara?"

"Me confesaría tantas veces como fuera necesario."

"Ahh... Bueno, pensé... Que pareces el tipo de persona que haría eso". Koyuki dejó salir un suspiro.

Sonaba como cansada desde el fondo de su corazón. O así sonaba, pero Naoya lo sabía bien. La mitad era alegría, y la mitad era miedo.

"Pero, si eres tan firme sobre ello... Podría estar dispuesta a pensarlo. Hazlo lo mejor que puedas."

"Ya veo, gracias. Te daré la mejor confesión posible.

"Por favor, no, mi cuerpo y mi corazón no lo aceptarán".

"Pero, el comienzo es el más importante, ¿no? Por cierto, tengo tres meses de salario de mi trabajo a tiempo parcial, ¿quieres un anillo o algo así?"

"¡No saltes a la portería mientras estás de pie en la línea de salida! ¡Todavía no quiero algo así!"

"Ya veo." Sin embargo, eh. Qué pena."

Básicamente dijo que 'eventualmente' quería uno. Koyuki ni siquiera se dio cuenta de su error, pero Naoya se lo guardó para sí mismo.

Siguieron caminando así, ya que llegaron a la parte más profunda del distrito residencial. En una esquina, Koyuki de repente dijo 'Detente'. Justo en frente de los ojos de Naoya había un gran edificio de aspecto occidental, rodeado por una pared alta.

"¿Esta es tu casa, Shirogane-san...? Es enorme."

"No del todo, es normal". dijo Koyuki.

Sin embargo, el aspecto exterior sólo podría describirse como lujoso, y una vez que se abrió la entrada, se podía ver un largo pasillo que se extiende profundamente en el interior. Las pinturas que colgaban en las paredes parecían extremadamente costosas también.

Naoya dejó a Koyuki dentro de la entrada, cuando comenzó a inquietarse nerviosamente.

"Um... gracias por traerme aquí... ¿Quieres entrar un rato?"

"No, voy a abstenerme de ello."

"Ya veo."

La respuesta de Koyuki sonaba una mezclada entre alivio y arrepentimiento. De hecho, ser invitado a la casa de la chica que te gusta es algo que todos los chicos admiraban, pero Naoya no quería ser demasiado insistente.

"Tus padres no están en casa hoy, ¿verdad? Me sentiría mal al entrar. Voy a pasar por otro momento con un regalo, y presentarme adecuadamente.

"Tengo varias preguntas sobre lo que acabas de decir, pero lo ignoraré por hoy..." Koyuki negó con la cabeza con incredulidad.

Al parecer, había aprendido a no replicar todo lo que Naoya soltaba. Después de un suspiro, sus mejillas se convirtieron en un color rosa, mientras ella lo miraba.

"Hoy es tarde, así que... Te veré en otro momento."

"Sí. ¡Hablamos luego. cuídate!"

"Ah, espera."

Naoya estaba a punto de dar la vuelta, sólo para ser detenido por Koyuki. Estaba confundido cuando la chica sacó un cuaderno de su bolso.

"Aquí. Puede que no lo necesites, pero... Pensé que podría ser de ayuda.

"... ¿Qué es esto?"

"Tuviste clases complementarias de matemáticas, ¿verdad? Por eso, bueno... Anoté todo con las explicaciones respectivas".

"¿¡En serio!? " Naoya aceptó el cuaderno para echar un vistazo rápidamente a través de él, y encontró todo tipo de fórmulas y explicaciones escritas allí.

Cada vez que se trataba de algo crucial, subrayaba con un color, y ponía hasta los detalles más pequeños. Esto era aún más detallado que la mayoría de los libros de referencia que había por ahí. Esto continuó durante varias páginas, dejando a Naoya sin palabras. Koyuki aparentemente se preocupó por eso, y echó su rostro hacia abajo torpemente.

"Podría sólo estarme entrometiendo, pero si tropiezas ahora, empeorará más tarde. Quería dártelo en el camino de regreso, pero debido a la tienda de crepas, me olvidé, y... ¿Qué es esa cara?"

"Bueno..." Naoya dejó salir una voz desconcertada.

Cuando se puso una mano en la boca, se encontró sonriendo.

"¿Puedo... confesarme de nuevo?

"¿Por qué harías eso? ¿No aprendiste nada de antes?

"Quiero decir, me gustas tanto..." Naoya no mostró vergüenza.

¿Cómo no se enamoraría de ella? Ahora que él lo piensa, ella mencionó que había estado estudiando en la biblioteca cuando se encontraron en la puerta de la escuela, pero ella probablemente estaba creando estas notas. Fue todo por el bien de Naoya,

"En serio, ¿puedo casarme contigo? Eres demasiado adorab—¿¡Blugh!?"

"¡Cállate! ¡Vete a casa ya!"

El cuaderno fue estampado justo en la cara de Naoya, empujándolo fuera de la entrada. Al mismo tiempo que la puerta se cerraba, recibía un mensaje. Por supuesto, era de nada menos que Koyuki, con contenidos simples.

'Si no entiendes nada, pregúntame. Adiós'.

Naoya miró las notas y la pantalla, y se puso hacia arriba en el suelo.

"... Sí, esto es realmente amor".

Más bien, ¿Cómo le tomó tanto tiempo darse cuenta? Ahora que era consciente de ello, estos sentimientos no se detendrían. Naoya se encontró sonriendo, y eso no mostró señales de detenerse.

"Realmente terminaré confesandome si me relajo un segundo... Aunque tengo que llegar correctamente a ella primero... Qué problemático." Murmurar palabras como estas, Naoya siguió con su camino.

El cielo era de color naranja, mostrando lentamente signos de cambio a negro oscuro. Incluso en esta oscuridad que se acercaba, los pies de Naoya sentían luz, ya que su estado de ánimo no podía haber sido mejor.

"¿¡…!?"

Sus pies se detuvieron. Observó su entorno, pero sólo Naoya estaba cerca. Había sentido una mirada fría golpeándole la espalda justo ahora, viniendo de la Residencia Shirogane, pero que había desaparecido de inmediato.

"No fue sólo... mi imaginación, ¿verdad? Naoya se rascó la cabeza, y comenzó a caminar adelante de nuevo.

Pocos días después descubrió la identidad de esa mirada, mientras encontraba una carta dentro de su casillero.